Saber el camino al que nos estamos dirigiendo puede parecer algo muy simple sobre el papel. Como todas las cosas sencillas, puede dar la sensación de que no es hay necesidad de hacer hincapié, no se necesita hablar de ello en exceso. Si estuviéramos solos por el camino, igual esto tendría sentido, pero la verdad es que la mayoría de las veces no lo estamos. No dedicar el tiempo necesario para compartir tu visión con las demás personas que forman parte de tu negocio puede ser un error difícil de remediar. Tienes ante ti la forma de pasar de jefe a líder.
Los empleados, los clientes, los proveedores, etc, necesitan conocer tu visión para entender exactamente qué se requiere de ellos y en qué medida. Además, puede que simplemente no compartan tu visión, entonces lo único que estaríais haciendo sería perder el tiempo. Las personas encargadas de dirigir un negocio tienen conceptos muy distintos, y también responsabilidades muy distintas a las de los demás. Tienen la capaz de ver el crecimiento antes de que suceda, pero también son capaces de limitar este crecimiento si no dan el paso de compartir cierta información con su equipo de trabajo.
La comunicación es un marco vital dentro de cualquier negocio, pero también en cualquier aspecto de la vida. Son incontables las ocasiones en las que nos damos cuenta de todo lo que estamos perdiendo, perdimos o podemos perder por una falta de comunicación. Es algo remediable, al menos lo que al presente y al futuro concierne. Las conversaciones generan preguntas, respuestas, ideas sobre tu negocio. Nunca puedes pasar por alto la importancia de la comunicación dentro de tu negocio.
Por todo esto es importante que tus empleados conozcan tu visión. No significa que debas planear cada paso con ellos, es tu negocio y debes actuar como creas que corresponde. Todo esto es tan simple como hacer saber tus decisiones, tus metas a largo plazo, pedir ayuda cuando sea necesario y ayudar a construir un negocio fructífero y que aporte una buena calidad de vida a todos.
Si ni tú mismo tienes clara tu propia visión, quizás sea el momento de elaborar un mapa clara sobre el asunto. El proceso de toma de decisiones, aunque arduo en ocasiones, es la única forma que tenemos para dar forma a cada negocio y a cada aventura en general. Los resultados positivos llegarán antes de lo esperado.