La mente humana necesita mantener los niveles de producción, pero es muy complicado que actúe con efectividad si existen factores externos que le provocan estrés. Puede que sean problemas financieros, una ambiente de trabajo un tanto tóxico, o simplemente un ambiente laboral muy pobre. Todos estos problemas tienen un gran impacto en la mente, que deja de dar su cien por cien. Por ello, es importante tener la capacidad de crear un ambiente positivo en el cual la mente pueda aumentar sus niveles de productividad.
Si como líder eres capaz de crear un ambiente positivo para tus trabajadores, podrás observar como les estás ayudando a mantener su productividad. Además, si lo haces de la forma correcta, les estarás ayudando también a disfrutar verdaderamente del tiempo que pasan trabajando en tu empresa. Si quieres hacerlo pero te encuentras un poco perdido, aquí te dejamos algunas ideas para empezar:
Aprende a delegar en base a las fortalezas de tus empleados
No existe mejor forma para que tus empleados exploren sus habilidades y sus responsabilidades dentro del entorno laboral. Seguramente descubran nuevos intereses que traigan grandes recompensas a tu empresa. Tener en cuenta, y conocer en profundidad, cuáles son las fortalezas naturales de tus empleados, es la clave para facilitar sus experiencias y para asegurar que las metas de tu empresa desembocan en un buen puerto.
Sé flexible
La flexibilidad laboral es uno de los requisitos de muchos de los trabajadores, pero también es una utopía en muchos casos. En ocasiones, la flexibilidad puede resultar clave a la hora de retener a un talento. Es difícil imaginar cómo un empleado puede dar el cien por cien en el trabajo si está siempre bajo la presión del tiempo. Si tu industria y tu empresa lo permite, una de las mejores cosas que puedes hacer elevar el nivel de flexibilidad de tu empresa.
El interior de la empresa tiene un impacto positivo o negativo
La atmósfera laboral no son solo cosas intangibles, es también literal en cierto modo. La iluminación de la empresa es importante, pero también cómo esté amueblada. Tener en cuenta la temperatura a la que están trabajando tus empleados, todo es importante. Pregunta directamente qué cambiarían, o qué consideran que está disminuyendo su productividad.