En la 54ª Reunión Anual del Foro Económico Mundial (celebrado del 15 al 19 de enero de este año), los líderes mundiales se reunieron para restablecer la confianza, generar nuevas ideas y crear alianzas para promover soluciones a los desafíos a los que nos enfrentamos. Desde la inteligencia artificial hasta el cambio climático y el crecimiento global, los líderes debatieron sobre cómo la cooperación puede ayudar a avanzar en los retos a los que nos enfrentamos hoy y en el futuro.
El tiempo reclama una nueva clase de líderes: aquellos que no sólo sean expertos en tecnología, éticamente responsables, con mentalidad empresarial, con conciencia sistémica y socialmente influyentes, sino también con capacidad de adaptación y excepcionales a la hora de restablecer y fomentar la confianza.
En una era marcada por los rápidos avances tecnológicos y los cambiantes panoramas mundiales, el concepto de liderazgo está experimentando una evolución transformadora. El mercado actual, caracterizado por una fusión de tecnologías que difumina las fronteras entre las esferas física, digital y biológica, no solo está redefiniendo las industrias, sino también la esencia misma del liderazgo.
Estos son algunos de los temas clave de este enero:
Liderazgo tecnológico: repensar las funciones en un mundo tecnológico emergente
Con tecnologías emergentes como la IA, blockchain e IoT, los líderes deben adaptar sus estrategias para aprovechar estas herramientas de manera eficaz. El reto consiste en integrar estas tecnologías manteniendo las normas éticas y garantizando los beneficios sociales.
Solo el 25 % de las empresas han tenido éxito en sus esfuerzos de transformación digital, según una encuesta realizada a más de 240 ejecutivos de alto nivel.
Para aumentar las probabilidades de éxito, los ejecutivos deben seguir seis pasos clave: crear una visión clara, equipar a la plantilla, compartir la responsabilidad, centrarse en objetivos pequeños, aprovechar los datos y crear agilidad y resistencia. Las tácticas específicas para lograr estos pasos incluyen captar la visión a través de conversaciones con las partes interesadas, capacitar a la fuerza de trabajo, establecer una responsabilidad compartida entre los ejecutivos de tecnología y de negocios, y establecer hitos alcanzables. El éxito de las transformaciones digitales requiere un liderazgo fuerte, alineación y adaptabilidad.
Esta brecha subraya la urgente necesidad de que los líderes evolucionen con el panorama tecnológico.
Responsabilidad y rendición de cuentas: enfoques centrados en el ser humano en tiempos difíciles
El rápido ritmo del cambio requiere un enfoque de liderazgo que dé prioridad a los valores humanos. Según un informe del Foro Económico Mundial, el 88% de los directores generales coinciden en que garantizar que la Cuarta Revolución Industrial esté centrada en el ser humano es una responsabilidad fundamental de los líderes. Esto implica tomar decisiones que no sólo impulsen la innovación, sino que también tengan en cuenta el impacto social más amplio, especialmente en términos de privacidad, ética y equidad.
Liderazgo emprendedor: adoptar una mentalidad emprendedora
La naturaleza impredecible del mundo actual exige líderes que piensen como empresarios: ágiles, innovadores y tolerantes al riesgo. Un estudio de McKinsey destaca que las empresas con líderes emprendedores tienen 1,8 veces más probabilidades de lograr mayores tasas de crecimiento. Este espíritu emprendedor es vital para navegar por las complejidades y aprovechar las oportunidades.
Liderazgo sistémico: liderar en un mundo interconectado
La interconexión del mundo contemporáneo exige un enfoque de liderazgo sistémico, en el que los líderes miran más allá de sus organizaciones para comprender e influir en sistemas sociales más amplios. Según Harvard Business Review, los líderes sistémicos son un 30% más eficaces en la consecución de cambios sostenibles. Este enfoque es crucial para afrontar retos globales complejos que trascienden las fronteras tradicionales.
Modelar las sociedades: el auge del liderazgo no tradicional
En esta nueva era, los actores no tradicionales, como las ONG, las empresas emergentes y los activistas, se están convirtiendo en fundamentales en la configuración de las estructuras sociales. Su audaz liderazgo está llenando los vacíos dejados por las instituciones tradicionales. Por ejemplo, el auge del emprendimiento social ha dado lugar a soluciones innovadoras para los problemas sociales, y el mercado mundial del emprendimiento social está valorado en más de 500.000 millones de dólares.
Liderazgo adaptativo: el cambio hacia la experimentación
El mantra de «analizar, planificar y aplicar» está dando paso a estilos de liderazgo más adaptativos que hacen hincapié en la experimentación y el aprendizaje. Este enfoque consiste en responder a los cambios, como pone de relieve un estudio de BCG que demuestra que las empresas adaptables obtienen un rendimiento total para el accionista tres veces superior al de sus homólogas menos adaptables.
En estos tiempos de transformación, los líderes que adopten estas cualidades serán los que den forma a un futuro no sólo tecnológicamente avanzado, sino también socialmente responsable y centrado en el ser humano.
Samuel Alemayehu, empresario e inversor de renombre, compartió conmigo sus observaciones desde Davos 2024, destacando el papel predominante de la IA en el discurso de este año. Destacó el amplio impacto de la IA en diversos sectores, como la sanidad, las finanzas y la educación, así como su influencia transformadora y la profundidad de las conversaciones en torno a sus aspectos éticos y normativos.
Alemayehu también se refirió a la importancia actual de las cuestiones climáticas. Aunque puede que no hayan sido el tema central como en años anteriores, los avances en tecnologías innovadoras destinadas a hacer frente al cambio climático son notables. Expresó su admiración por la dedicación y el ingenio de las partes interesadas en este campo.
Otro aspecto clave que destacó Alemayehu fue el compromiso integrador de Global South. Le pareció alentador ver su representación y la incorporación de diversas perspectivas a los debates, lo que en su opinión enriqueció la calidad y el carácter integrador de los procesos de toma de decisiones en Davos.
