Flatiron, una de las filiales estadounidenses de ACS, será la encargada de renovar los dos puentes del denominado paso Susquehanna River Rail Bridge (Maryland) –claves en el corredor ferroviario del Noreste de Estados Unidos– que explota Amtrak, con un presupuesto de inversión de 1.500 millones de dólares (unos 1.370 millones de euros), según publica Expansión.
El proyecto está dividido en varias fases: la Fase 1 –en la que se construirá la estructura del puente oeste adyacente al puente ferroviario existente– está previsto que comience en 2025 y se alargue hasta 2030; mientras que la Fase 2 se iniciará en 2031 y terminará pasados cinco años, en 2036.
Ubicado al norte de Baltimore, el consorcio de ACS reemplazará el puente existente, construido en 1906, con dos nuevas megaestructuras ferroviarias, según subraya el medio económico.
El paso existente es el puente móvil más grande a lo largo del corredor Noreste y, debido a su antigüedad –117 años–, los trenes se ven obligados a reducir la velocidad a 140 kilómetros por hora. Más de 110 trenes de Amtrak y Norfolk Southern Railway lo cruzan diariamente, transportando a casi 18.000 pasajeros.
Con esta renovación, los nuevos puentes sobre el río Susquehanna reducirán los tiempos de viaje y aumentarán la fiabilidad del servicio para Amtrak.