Afortunadamente existe una “guía” fácil de llevar en la que un trabajador de dilatada carrera puede verse cómodo buscando empleo, estos son los pasos:
Antes de buscar tu próximo trabajo como veterano, encuentra lo que te motiva y lo que realmente quieres hacer. Es fácil aceptar lo primero que aparece, pero a una determinada edad el dinero es un factor secundario; piensa en hacer lo que amas y no te conformes con menos.
Conoce tu valor: tras una vida dedicándote a tu campo de negocios, posiblemente valgas más de lo que crees. El volumen de las experiencias puede beneficiar a muchas empresas que se interesarían por ti. Véndete partiendo de esta base y transmite a los empresarios este punto tan importante.
Deja a un lado los prejuicios: si entras a una empresa con el cartel de “veterano” o cuelgas otros en los hombros de tus compañeros, solo buscarás problemas. Tanto una edad avanzada como una prematura puede producir prejuicios, si no te gusta que los tengan en tu contra, no los utilices igualmente.
El último consejo es que te mantengas al día: tanto en herramientas de trabajo como en tu ropa o actitud ante una búsqueda de empleo –o conservación del mismo-. Si no has actualizado tu currículo desde hace aproximadamente cuatro años es posible que éste se encuentre anticuado en cuanto a palabras o expresiones ahora necesarias. ¡Renuévate por dentro para hacerlo por fuera!