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La reacción de los inversores de ChatGPT al despido del CEO de la empresa

Ni Vinod Khosla, ni Reid Hoffman, ni siquiera Microsft, fueron avisados previamente de la decisión de OpenAI de echar a Sam Altman de la empresa.

La destitución del director ejecutivo, Sam Altman, por parte de OpenAI y la posterior renuncia del presidente Greg Brockman conmocionaron a todo el mundo tecnológico, incluidos a los propios inversores de la empresa y creadores del famoso ChatGPT.

Fuentes muy cercanas a OpenAI dijeron a Forbes que los principales patrocinadores de capital de riesgo de la empresa no recibieron aviso previo de la noticia. «Esto es una locura», dijo un inversor familiarizado con el asunto.

Además, fuentes cercanas a Vinod Khosla dijo que no sabía nada del derrocamiento antes del anuncio (el propio Khosla declinó hacer comentarios al respecto). Su firma, Khosla Ventures invirtió en OpenAI en 2019.

Reid Hoffman, uno de los primeros inversores que anteriormente formó parte de la junta directiva de OpenAI, tampoco conoció la noticia, según fuentes cercanas a él (Hoffman también se negó a hacer comentarios incluso a través de un portavoz).

Microsoft, que ha invertido más de 10 mil millones de dólares en OpenAI, se enteró del despido de Altman de la junta solo un minuto antes de que se compartiera la noticia en un comunicado de prensa, según informa Axios.

Thrive Capital, que realizó una oferta pública de adquisición para comprar varias acciones en abril, donde además estuvo en conversaciones para comprar más por una valoración de 80 mil millones de dólares el mes pasado, según The Information, tampoco supieron del cese hasta conocerlo en las noticias.

Los inversores iniciales en el lanzamiento de OpenAI en 2015, cuando todavía era una organización sin fines de lucro, incluyeron a Hoffman, Elon Musk, Peter Thiel y Amazon Web Services, así como a los propios Altman y Brockman. Ahora, la estructura corporativa de OpenAI involucra una empresa de IA con fines de lucro controlada por una organización coordinadora sin fines de lucro. Los inversores en empresas con fines de lucro acuerdan un límite máximo para el retorno de su inversión; para los inversores iniciales, el límite era de 100x. Según PitchBook, entre los inversores posteriores se encuentran Andreessen Horowitz, Bedrock Capital, Sequoia y Tiger Global.

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