Su firme apoyo a destacadas organizaciones y eventos le conforman como claro ejemplo de diplomacia cultural y empresarial.
¿Cuál es el estado actual de las relaciones bilaterales entre EE UU y España? ¿Y con la Unión Europea en general?
España es uno de los aliados de más largo recorrido de EE UU y sigue siendo uno de los más próximos. En campos come el comercio, defensa, inversión y seguridad, hemos conseguido nutrir una alianza que avanza en pos de intereses comunes; esta asociación nunca ha sido tan fuerte. Me sorprendo constantemente por los vínculos entre nuestros países, que son evidentes a todos los niveles. Desde la calidez en la relación entre el Rey Felipe y el Presidente Obama, hasta los turistas estadounidenses que vienen a España para maravillarse con la historia de Madrid o la belleza de la Costa del Sol.
EE UU ha considerado durante mucho tiempo a la UE como su socio más cercano en la comunidad global, y esta es una asociación que esperamos expandir económicamente mientras negociamos la nueva Asociación Trasatlántica para la Inversión y el Comercio (TTIP). El mes pasado, viajé a Bruselas para coordinar con mis colegas cuestiones relativas a la OTAN y la UE y tuve la oportunidad de discutir nuestras prioridades conjuntas con eurodiputados y la cúpula directiva de la UE sobre asuntos muy variados, desde la seguridad hasta el comercio. Además del TTIP y la cooperación militar, nuestras principales prioridades dentro de la UE incluyen la privacidad de datos, la creación de un mercado digital único, la seguridad energética, el cumplimiento del estado de derecho, la migración y la continuación de sanciones contra Rusia como parte de los Acuerdos de Minsk.
¿Cómo se ve a España desde EE UU? ¿Cómo la ve usted desde un punto de vista económico?
España es conocida en EE UU por su vibrante cultura, su arte y arquitectura, por sus delicias culinarias y su gente acogedora. Hay una fuerte demanda en EE UU de todos los servicios y productos que España puede ofrecer y esto no podría ser mejor ilustrado que por el hecho de que a día de hoy, mi país es el mayor consumidor de las exportaciones españolas de cualquier país fuera de la UE.
A pesar de la actual situación política, las instituciones democráticas en España son fuertes. Las elecciones no concluyentes del año pasado reflejan un nuevo capítulo en la evolución democrática de España que ahora incluye nuevas voces y esperamos que los partidos políticos sigan negociando hasta que un gobierno pueda ser formado. Por otra parte, Estados Unidos cree en la recuperación económica de España; los indicadores macroeconómicos se están moviendo en la dirección correcta y las empresas estadounidenses consideran a España un foco de atención potencial para la inversión. Viajo a EEUU con frecuencia para mantener contactos con líderes de la comunidad empresarial que tiene intereses en España –Eric Schmidt, de Google, Chuck Robbins de Cisco, Jon Gray de Blackstone, Ken Howery del Founders Fund y cofundador de PayPal o los líderes del Beacon Council de Miami-Dade, entre otros–. Así que estoy en condiciones de reforzar con ellos directamente la pujanza económica de España, su creciente apertura a la innovación y su vitalidad dentro de Europa. El clima económico sigue siendo fuerte.
Su trabajo en favor del emprendimiento empresarial es verdaderamente notable, prueba de ello es IN3. ¿Cuáles considera que son las mejores vías para potenciarlo?
Durante la última década el espíritu emprendedor ha demostrado continuamente ser un motor de creación de empleo, innovación y crecimiento económico. El presidente Obama ha hecho de la promoción del emprendimiento uno de nuestros objetivos de política exterior. El recurso más valioso de España es la creatividad de su fuerza laboral, increíblemente inteligente y con gran talento. Es por eso que puse en marcha el año pasado un evento único centrado en el espíritu empresarial, IN3, donde reunimos a innovadores, inversores e instituciones para promover la inversión y fortalecer las conexiones entre EE UU y los ecosistemas empresariales españoles. España está sin duda en el radar, e IN3 es sólo una de las formas a través de la cual ayudamos a llamar la atención sobre el increíble potencial de España. Madrid acogerá la siguiente conferencia en junio.
En el mundo de la cultura su apoyo al cine ha sido muy destacado. ¿Qué se podría mejorar en un sector como el cultural que parece no salir de la crisis?
La industria de la cultura y el entretenimiento en España genera un 4% del PIB español y una facturación anual de 41 millones de euros. Esta industria genera directamente más de 500.000 puestos de trabajo de alta calidad. He tenido la increíble experiencia de ser capaz de conectar a los miembros de la industria del cine en ambos lados del Atlántico con beneficio para ambos. Al mismo tiempo, España, al igual que EE UU, está trabajando para adaptarse al nuevo entorno de Internet, con todas sus ventajas y desafíos.
He hecho de la protección de la propiedad intelectual una de mis prioridades como embajador, una causa en la que creo. España ha dado grandes pasos en relación al tema, pero la falta de una protección eficaz de los mismos y la ausencia de mecanismos de aplicación cuesta a las multinacionales españolas millones de dólares al año y dificulta la inversión en España. Con una mejor protección de los derechos de propiedad intelectual, especialmente con mayor vigilancia y más recursos para luchar contra ese delito, la industria estaría preparada para crecer considerablemente en los próximos años.
Muchas empresas estadounidenses buscan establecerse en España. ¿Cómo ve actualmente el nivel de inversión? ¿Cuáles son los sectores más atractivos para ello?
El nivel de inversión en España es alto, con presencia de compañías estadounidenses en muchos sectores, desde biotecnología al sector del automóvil, desde equipos médicos hasta diversas franquicias. Estamos viendo inversión en el sector inmobiliario, en bonos españoles –prueba de la confianza en la trayectoria económica de España–, también en sectores tecnológicos tales como los juegos digitales o impresión 3D. Pero la inversión también está creciendo en la otra dirección, de hecho España es el noveno mayor inversor en EE UU, con más de 54.000 millones de dólares en inversión directa. El potencial del mercado norteamericano es una gran atracción para las empresas españolas en todas las áreas. No sólo es EE UU la mayor economía del mundo, es también una excelente plataforma para las empresas españolas que pretenden crecer en los mercados de todo el continente americano. Los múltiples acuerdos de libre comercio que EE UU tiene firmados con países de América Latina y Caribe han creado un mercado de consumo de más de 700 millones de personas. Las oportunidades de triangulación entre EE UU, España y América Latina son enormes y cada vez más empresas de ambos lados del Atlántico las están encontrando.
FOTOGRAFÍA: JAVIER MÁRQUEZ LERA
¿Qué proyectos de colaboración entre EEUU y España consideraría más importantes?
Nuestra asociación económica, en particular nuestra capacidad para el intercambio de bienes, servicios e ideas, mejoraría considerablemente gracias a la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP) que se está negociando actualmente entre EE UU y la UE. Varios informes independientes han demostrado que España se beneficiará significativamente con la implementación del TTIP. Se espera crear más de 300.000 puestos de trabajo en la economía española, y el salario medio del trabajador español se incrementará en un 0,72% al año. Más importante aún, las empresas pequeñas, que representan el 95% de todos los negocios en España, verán una diferencia positiva en su capacidad de exportar a EE UU. La eliminación de los obstáculos al comercio también aumentará el vibrante intercambio cultural entre nuestros dos países. Otra área destacada de trabajo entre EE UU y España es el esfuerzo conjunto para promover la paz, el Estado de derecho y la libertad en todo el mundo en asociación con las fuerzas de seguridad españolas desplegadas en misiones internacionales clave.
La situación en Siria se hace insostenible. Surgen cuestiones como: ¿Intervención militar? ¿Acuerdos con otros países para una estrategia común contra el terrorismo islámico?
Recientemente el secretario de Estado, John Kerry, anunció, junto con la delegación de Rusia y otros miembros del grupo de apoyo internacional a Siria, que las disposiciones finales se habían aceptado para lograr un cese de hostilidades en Siria. EE UU está comprometido en encontrar una solución que permita una transición negociada pacífica y hace hincapié en que todas las partes involucradas en este acuerdo de alto el fuego deben trabajar juntas durante los próximos meses para hacer posible una salida política a este conflicto. Con respecto a ISIS, hemos intensificado nuestra campaña; hay una coalición internacional de 65 países en la zona que incluye a todos los países de la región que rodean a Irak y Siria y que EE UU ha movilizado para degradar y derrotar a este grupo terrorista.
¿Cuál es la postura de EEUU en el acuerdo sobre el cambio climático firmado en la Cumbre de París?
Vemos el acuerdo firmado en la COP 21 como un importante paso adelante en el esfuerzo que todos debemos llevar a cabo para combatir el cambio climático. Como señaló el secretario de Estado John Kerry en su discurso en París, el acuerdo es un notable compromiso global, sin embargo, no es perfecto. Debe ser visto como una plataforma sobre la que seguir construyendo. EE UU, España, y otros participantes no sólo deben cumplir con las promesas que hicieron, también deben reconocer que este es sólo el primer paso. Tenemos que seguir aprendiendo de las mejores prácticas para reducir nuestra huella de carbono, idear nuevas soluciones al cambio climático y reconocer que éste es tal vez el mayor problema al que se enfrentará la próxima generación y que merece nuestra atención completa e inmediata.
¿Podría hablar de sus planes como jefe de la diplomacia del país más influyente del mundo?
Obama pronunció un discurso a todos los embajadores del país a mediados de marzo y en esa charla nos dijo: “Tengo la intención de hacer todo lo que pueda con cada minuto que me queda en este trabajo para seguir progresando en hacer el mundo más seguro, más próspero, y para hacer frente a los enormes retos que muchas personas por todo el planeta tienen sobre sus espaldas.” Mi tiempo como embajador está ligado al del presidente Obama, y utilizo ese hecho como mi inspiración.