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Empresas

Cómo detectar al empleado que nunca deberías contratar

Hemos hablado muchas veces de liderazgo, de las características propias de los líderes y de lo ambiguo que se ha vuelto este término. Pero liderazgo también es saber a quién no tienes que contratar por el bien de tu empresa, es no tener a cierto perfil de personas trabajando en tu organización.

Los empleados, las personas que trabajan en Recursos Humanos y los managers, trabajan para encontrar a los mejores, para desarrollar los mejores equipos posibles y evitar contratar a personas que van a suponer un error. Y la culpa de contratar a una persona que no concuerda con el perfil de tu organización, no es culpa de esa persona, sino exclusivamente de quien le contrata.

Y ahora es cuando el artículo cambia radicalmente. Podríamos seguir con esta línea, pero vamos a hablar del reconocimiento. Vamos a hablar de Juan por ejemplo. Juan es una persona que ha trabajado en tu empresa durante 30 años, una persona a la que todo el mundo adora, pero que nadie ha pensado en decírselo en alto, porque no hay necesidad de hacerlo. Puede ser que en los 30 años que Juan lleva trabajando para ti nunca te hayas fijado en él.

Juan es una pieza fundamental en tu empresa, y se va a emocionar cuando sepa lo que todos sus compañeros piensan de él. No deberías contratar a nadie que vaya a sentirse como se siente Juan ahora mismo. O deberías cambiar la política de reconocimiento de tu empresa. Es importante centrarse en el reconocimiento de las personas, de tus empleados, porque ellos son los que hacen posible el éxito de tu empresa.

Por ello, no deberías contratar a personas que no sean conscientes de la importancia del reconocimiento, personas que vayan a menospreciar a las demás.

Es muy fácil mostrar aprecio, las personas no necesitan grandes gestos y esto no es una comedia romántica. Se trata simple y llanamente de agradecer el esfuerzo, de felicitar un buen trabajo, de ser flexibles en las situaciones, porque la flexibilidad es algo crucial en el trabajo.

Por ello, si eres el líder de tu empresa, comienza a concienciar a tu equipo y a Recursos Humanos y cambia tu política a la del reconocimiento, no te arrepentirás.