Astara Mobility, Calvera Hydrogen, Cirsa, Cosentino, Hotelbeds, OK Mobility, Puig y Restaurant Brands Iberia (RBI) son algunas de las empresas españolas que plantean su salida a bolsa en 2024 como un modo de obtener financiación.
La suma de todas estas compañías podría arrojar una capitalización bursátil superior a los 20.000 millones de euros, siempre que logren su salto al parqué, un objetivo difícilmente alcanzable para todas, según la experiencia de los asesores legales en este tipo de operaciones consultados por Expansión.
El precio del dinero, según recoge el medio económico, sería uno de los motivos por los que se ha abierto esta ventana de inversión para que las compañías salten al parqué, ya que el aumento de los tipos ha generado que las expectativas de emisor y comprador estén desalineadas.
En los últimos años, otra alternativa para las empresas es la fusión con compañías especiales con propósito de adquisición (SPAC, por sus siglas en inglés), lo que permite saltar al parqué sin tener que ejecutar una OPV.
Las dos con más opciones
En este sentido, los expertos consultados por Expansión señalan que Puig y Astara son las dos compañías con opciones por encima del resto de salir a bolsa. “Por tamaño, sector y profesionalización de negocio son las que tienen más posibilidades de culminar con éxito su proceso de salida”. Un proceso que desde que se anuncia la intención de realizar la OPV hasta culminarlo, en el mejor de los casos pueden pasar seis meses.
Por el contrario, los asesores miran con recelo la operación de Volotea. “La aviación es un sector regulado. Como mínimo tienes que sacar un 25% a bolsa. La Sepi rescató a la compañía con 200 millones de euros. Todo esto suma dificultad a la operación”, aclaran.
Todo dependerá en gran medida de que las estrellas estén alineadas para las OPV españolas en la primavera de 2024.