El martes, la Fundación Bill y Melinda Gates anunció una inversión de treinta millones de dólares en una nueva plataforma de inteligencia artificial (IA) en África que, según afirma, ayudará a los científicos a desarrollar soluciones para la atención sanitaria y los problemas sociales en todo el continente.
La organización espera que la iniciativa haga que la IA, a la que Bill Gates se ha referido como «el avance más importante en tecnología desde la interfaz gráfica de usuario», sea más accesible a los investigadores africanos, allanando el camino a la innovación local. También pretende garantizar que la tecnología se desarrolle de forma segura, ética y equitativa. La nueva plataforma de IA incluirá un repositorio de datos, así como expertos en desarrollo técnico y política reguladora.
«El mundo necesita asegurarse de que todo el mundo –y no sólo las personas acomodadas– se beneficie de la IA. Los gobiernos y la filantropía tendrán que desempeñar un papel fundamental para garantizar que reduce la desigualdad y no contribuye a ella. Esta es la prioridad de mi propio trabajo relacionado con la IA», afirmó Gates en una entrada de blog en marzo.
A medida que crece el interés por la IA, la fundación ha presionado para llevar la tecnología a los países de renta baja y media. En agosto, anunció que destinaría cinco millones de dólares a financiar cerca de cincuenta proyectos de IA generativa centrados en la salud y el desarrollo mundiales en países como Pakistán y Brasil. Gates dijo que la nueva inversión de treinta millones ayudaría a los innovadores africanos a agruparse en torno a algunas de las áreas en las que se han centrado estos proyectos, como la salud, la agricultura, los servicios financieros y la innovación, y a llevar sus innovaciones a la siguiente fase.
«Parte del objetivo es que estas aplicaciones, que reducen la desigualdad, no lleguen diez o veinte años más tarde, sino que estén a la vanguardia», dijo Gates el martes en la reunión anual de Grand Challenges –una conferencia que reúne a socios de financiación e investigación– que se celebra actualmente en Dakar (Senegal).
Gates también habló de los retos a corto plazo que plantea la IA, como garantizar la precisión, los derechos de autor y las falsificaciones.
En cuanto a los retos a más largo plazo, afirmó: «Nuestro mundo está diseñado en torno a la escasez; escasez de médicos, profesores, alimentos. Si alguna vez se llega a un punto en el que a través de la IA, tanto robótica como una especie de IA de cuello blanco, se realizan muchas de esas tareas, entonces el trabajo humano ya no es necesario y se tiene un problema de exceso que es muy, muy diferente», añadiendo que «ese no es el problema que tenemos hoy. Ni siquiera estamos cerca de ello, pero esta es la primera tecnología que es esencialmente ilimitada en términos de lo capaz que llega a ser».
Bill Gates, con una fortuna estimada por Forbes en 109.500 millones de dólares, es actualmente la novena persona más rica del mundo. El empresario y su exesposa, Melinda French Gates, crearon la Fundación Gates en el año 2000 y han prometido miles de millones para financiar la investigación y el desarrollo de vacunas, la igualdad de género y becas universitarias. Con unos activos de 67.300 millones de dólares en diciembre de 2022, es la mayor fundación benéfica privada del mundo. El año pasado, Gates dijo que la organización probablemente duraría sólo 25 años más.