El fabricante de circuitos integrados Broadcom se anotó un beneficio neto atribuido de 3.303 millones de dólares (3.047 millones de euros) en su tercer trimestre fiscal, finalizado el 30 de julio, lo que equivale a un aumento del 10,1% de las ganancias que registró en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Los ingresos durante el trimestre fueron de 8.876 millones de dólares (8.187 millones de euros), un 4,9% más. Por segmentos de negocio, las ventas de semiconductores avanzaron un 4,8%, hasta los 6.941 millones de dólares (6.402 millones de euros), mientras que las de software de infraestructura aumentaron un 5,2%, hasta los 1.935 millones de dólares (1.785 millones de euros).
Los costes totales asociados a los ingresos se situaron en los 2.712 millones de dólares (2.501 millones de euros), un 2,6% menos, al tiempo que los gastos de venta, generales y administrativos fueron de 388 millones de dólares (357,9 millones de euros), un 20,1% más. A la partida de investigación y desarrollo (I+D) se asignaron 1.358 millones de dólares (1.253 millones de euros), un 8,2% más.
«Los resultados del tercer trimestre de Broadcom se vieron impulsados por la demanda de tecnologías de redes de última generación a medida que los clientes de hiperescala conectan sus clústeres de IA [Inteligencia artificial] con centros de datos», ha explicado el presidente y consejero delegado de la multinacional, Hock Tan.
En cuanto al conjunto de los tres trimestres, Broadcom se anotó unos beneficios de 10.558 millones de dólares (9.738 millones de euros), un 33,4% más, tras elevar un 9,3% la facturación, hasta los 26.524 millones de dólares (24.465 millones de euros).
Dividendo
Además, el consejo de administración de la compañía ha aprobado un dividendo trimestral de 4,60 dólares (4,24 euros) por título pagadero el próximo 29 de septiembre a los accionistas de referencia al cierre del parqué el día 21 de septiembre.
De cara al cuarto trimestre, Broadcom anticipa que los ingresos rondarán los 9.270 millones de dólares (8.550 millones de euros) si se mantienen las «actuales tendencias y condiciones» del mercado.