Klépierre obtuvo unos ingresos netos por alquileres de 484,1 millones de euros en el primer semestre del año, superando un 7,3% la cifra del mismo período de 2022, según las cifras publicadas por la compañía.
El flujo de caja neto, a su vez, alcanzó los 1,21 euros por acción con un crecimiento interanual del 7,4% y la deuda neta sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) se mantuvo a 7,9x.
El grupo europeo de centro comerciales ha informado, además, de que la valoración de su cartera de centros comerciales baja un 1,4% en términos comparables en seis meses y la previsión de flujo de caja neto para el ejercicio de 2023 se eleva a, al menos, 2,40 euros por acción, un 7% más que en 2022.
El presidente del consejo de Klépierre, Jean-Marc Jestin, ha declarado que los resultados son «muy sólidos», respaldados por la consolidación de sus indicadores operativos en niveles elevados y una fuerte generación de flujo de caja neto, con un aumento del 7,4% respecto al año anterior.
Desde la empresa han destacado en una nota de prensa que en el primer semestre del año se han firmado 809 contratos de arrendamiento, un 16% más que en 2022. El flujo de operaciones incluyó 634 renovaciones y realquileres, con una tasa de reinversión positiva del 5,3%.