Tres años después de lanzar Foundr, UNA revista online para emprendedores, Nathan Chan decidió que necesitaba una página de Wikipedia. La plataforma está en contra de que las personas creen sus propias páginas, lo cual suponía un problema para Chan. Sin embargo, esta primavera decidió publicar un post en Facebook pidiendo ayuda. Afortunadamente obtuvo respuesta, le recomendaron a un editor con experiencia que construía páginas por una comisión. Chan acordó pagar 1300 dólares por páginas que hablaran sobre él y sobre su empresa.
A pesar de todos sus defectos, Wikipedia transmite cierta credibilidad. Si tu empresa aparece en la página, te conviertes en alguien importante. Tras Chan, ocurrió el boom, un mercado clandestino empezó a crecer. Estos trabajos pueden oscilar entre los cientos o los miles de dólares. Los editores están inundados de trabajo.
Pero los compradores deberían tener mucho cuidado. Todo lo relacionado con este servicio supone incertidumbre. Para empezar, la rentabilidad de aparecer en Wikipedia. La plataforma es buena para los negocios que empiezan, para darse a conocer. En cuanto hablamos de credibilidad, si una persona más mayor busca en la web, la credibilidad de Wikipedia cambia drásticamente.
Sea como fuere, las nuevas páginas tienen más posibilidades de ser exitosas porque los editores conocen perfectamente las reglas de Wikipedia, saben cómo ser objetivos e imparciales. Pero están siendo vigilados, lo que les lleva a ser un poco más cuidadosos al elegir con quién trabajar.