Entrevista a Miguel Carmelo, CEO y presidente de la Universidad Europea.
La pandemia ha acelerado el uso de las tecnologías y los centros de Educación Superior nos han dado una lección liderando este proceso. Las clases magistrales en aulas magnas han dado paso a metodologías vanguardistas que incluyen Inteligencia Artificial, la simulación, la gamificación o el metaverso, que empieza a abrirse camino en el sector educativo a pasos agigantados. Nos lo cuenta Miguel Carmelo, CEO y presidente de la Universidad Europea, quien advierte de que lo primordial es colocar siempre al alumno en el foco de este cambio. En un contexto de digitalización y automatización, cada vez hablamos más del llamado “aprendizaje a lo largo de la vida”.
¿Cómo se lleva a cabo este acompañamiento de los estudiantes?
Algunos autores vaticinan, efectivamente, que los jóvenes de hoy tendrán que reinventarse hasta siete veces durante su carrera profesional, de manera que los estudios de Grado son solo el comienzo de un aprendizaje que se extiende a lo largo de toda la vida. La clave pasa por interiorizar que hace ya mucho tiempo que la universidad ha dejado de ser un fin para convertirse en parte de un viaje.
Si se busca que el alumno encuentre su propio camino, ¿cuál es el rol actual del profesorado?
Su papel es clave. En el contexto actual las instituciones de Educación Superior estamos viendo cómo cambia continuamente la manera de aprender y de enseñar. En esta línea los nuevos modelos se han ido abriendo paso de la mano de la tecnología y, por eso, es más importante que nunca apostar por metodologías docentes innovadoras de la mano de un claustro comprometido. Nosotros contamos con uno muy especializado, capaz de liderar esa innovación que está ya dentro del aula y de acercar al estudiante a su profesión desde el primer día.
Una crítica clásica a la universidad siempre ha sido que no está lo suficientemente cerca del mercado laboral…
El mundo está cambiando a una velocidad vertiginosa, pero creo que las instituciones de Educación Superior estamos realizando un esfuerzo ímprobo para acercarnos a la realidad del tejido productivo. Debemos conocer a fondo las necesidades y perfiles profesionales que demandan las empresas, así como las últimas tendencias. Nosotros tenemos firmados más de 14.000 acuerdos con empresas de todos los sectores y nuestras ratios de empleabilidad rondan el 90%; muy probablemente porque estamos en contacto permanente con las profesiones para saber qué necesitan y ofrecérselo desde el rigor y con la máxima agilidad.
“IMAGINO UNA UNIVERSIDAD INNOVADORA, RESILIENTE, SIN FRONTERAS Y CON UNA APUESTA DECIDIDA POR LA TECNOLOGÍA”
¿Cada vez cuenta más el aprendizaje experiencial en detrimento del teórico?
El modelo de aprendizaje experiencial de la Universidad Europea ha demostrado ser un caso de éxito, atrás quedan las lecciones desde el estrado como se venía haciendo desde hace décadas, hoy la nueva manera de enseñar nos habla de la tecnología al servicio de la trasmisión de conocimiento y de un planteamiento que responde a un movimiento de la sociedad que ha evolucionado hacia un modelo de “siempre aprendiendo y nunca aprendido”
Nuestras aulas son espacios donde los estudiantes adquieren “horas de vuelo” de cara a su incorporación al mercado de trabajo, a través de claustros conectados con el mundo profesional y a través de metodologías educativas novedosas.
¿Cuáles serán las profesiones del futuro?
Adivinar qué ocurrirá con exactitud es una labor casi imposible, pero ahora mismo somos capaces de identificar tendencias. Sabemos, por ejemplo, que los perfiles profesionales relacionados con energías verdes, el sector salud, la tecnología, el análisis de datos, la estadística o la seguridad de la información serán muy demandados en los próximos años.
The World University Ranking 2022 califica a la Universidad Europea como una de las 20 mejores de España. ¿Qué diferencia a su centro educativo de otros?
Desde su nacimiento hace casi 30 años, la Universidad Europea ha destacado por su carácter innovador y por un modelo académico diferenciador que pone en el centro a los estudiantes. Nos diferencia, fundamentalmente, nuestro modelo de aprendizaje experiencial, pero también nuestra firme apuesta por la excelencia, la internacionalización, la proximidad al tejido productivo, contar con un claustro experto, nuestras metodologías docentes innovadoras y nuestra clara apuesta por la investigación.
¿Cómo imagina la Universidad dentro de diez años?
En el futuro, vamos a vivir una auténtica revolución en el panorama educativo con un claro protagonista: la Educación Superior. Hablamos del modelo de universidad que demanda una sociedad digital donde la formación online será parte fundamental de la oferta educativa. Por eso imagino una Universidad innovadora, resiliente, capaz de dar respuestas a los retos de futuro. Instituciones internacionales, sin fronteras, con una apuesta decidida por la tecnología y por el conocimiento humano.