En general, se entiende como accesibilidad a la facilidad que puede obtener cualquier persona para llegar a disfrutar debidamente de un lugar, servicio u objeto. Por costumbre, se suele ligar accesibilidad a la dificultad para acceder a los locales, centros, instituciones o lugares de una ciudad.
Pero no es tan sólo cuestión de acceso, sino realmente la accesibilidad abarca muchos más ámbitos que el físico. Existen principalmente cinco tipos de accesibilidad: arquitectónica, urbanística, de transporte, de comunicación y electrónica.
Si se comienza haciendo un análisis de la realidad a nivel mundial, se concluye que nos encontramos en un nivel de accesibilidad muy escaso. Podríamos hablar de que ni tan siquiera se cumple con un 10% de la accesibilidad necesaria. ¿Cuántos museos conoces que sean 100% accesibles?, ¿cuántos centros escolares cumplen con la accesibilidad en todos los aspectos?, ¿cuántos organismos públicos son accesibles para todos los ciudadanos?, ¿qué páginas o portales web conoces que sean accesibles?
La sociedad está cambiando y la teoría de un mundo 100% accesible está siendo cada vez más valorada y divulgada, no obstante su implementación deja mucho que desear o en algunos casos es inexistente. ¿Cuántos organismos públicos o empresas privadas conoces en los que existan baños adaptados a personas con discapacidad y se encuentren abiertos o funcionando? Normalmente acaban siendo el cuarto trastero de la cafetería o el baño cerrado del centro comercial.
En el ámbito de la sanidad, queda mucho camino por recorrer en materia de accesibilidad, debido al desconocimiento de los profesionales de las diferentes discapacidades y sus tipologías. Esto ocasiona en numerosas ocasiones situaciones de conflicto y malestar tanto para la persona con discapacidad como para sus familiares. Quizás sea cuestión de crear un protocolo de actuación a nivel sanitario e implantar un sistema de formación para el personal sanitario adaptado a las realidades existentes en la actualidad.
Un posible ejemplo de accesibilidad sería un centro educativo o un museo 100% accesible. Para ello hay que tener en cuenta a las personas con cualquier tipo de discapacidad como usuarias de los servicios que la entidad ofrece y hacerlas partícipe del cambio y mejora. Sería necesario adaptar las instalaciones y formar al personal de la entidad en materia de discapacidad y accesibilidad.
En materia de accesibilidad se debe adaptar el lugar, garantizando que las personas con discapacidad física, psíquica o sensorial (auditiva o visual) tengan las mismas oportunidades de acceso a cualquier actividad o espacio.
Las organizaciones de personas con discapacidad deben seguir en la lucha por conseguir una sociedad inclusiva y con accesibilidad universal y los organismos públicos impulsar y garantizar que se haga realidad este derecho básico de todas las personas.
Es importante y debe ser objetivo principal y fundamental a nivel mundial conseguir una sociedad que cumpla con la accesibilidad universal, aquella condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos y servicios, así como los objetos o instrumentos, herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad, comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.
¿Estamos construyendo un mundo en que la Accesibilidad Universal es una realidad?