Las empresas más antiguas de España
Quizás no sean tan conocidas como otras compañías legendarias, pero éstas se caracterizan por gozar de una historia que en muchos casos supera los cien años, y en algunos llega hasta los mil. Negocios, gran parte familiares, que todavía darán mucho que hablar.
En España también hay compañías que han desafiado al tiempo y suman siglos de existencia. No solo cuentan con un producto que a lo largo de los años sigue resultando atractivo al consumidor, sino que además la mayoría se ha organizado de manera sólida en torno a su planteamiento como empresa familiar alejada de ambiciosos riesgos financieros.
La calidad y la continua inversión e innovación también han sido claves de su envidiable longevidad.
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Codorníu
Era el año 1551 cuando Jaume Codorníu decidió dedicarse a la producción de vinos. Un siglo después la familia Raventós se hacía con la masía que durante más de 460 años, ha sido el corazón de una bodega referente en el mundo del cava. El negocio de vinos se ha ido consolidando con la adquisición de nuevas bodegas tanto a nivel nacional como internacional. En la actualidad el grupo, bajo la batuta de Mar Raventós, goza de una excelente salud financiera en un mercado que todavía sigue creciendo.
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Monte de Piedad de Madrid
Desde 1702 está operando en España esta empresa fundada por el padre Francisco Piquer, pionero en el negocio de los créditos rápidos y gratuitos que se garantizaban con joyas u otros bienes tangibles. Como institución benéfica estuvo sostenida por subvenciones y donativos, hasta que la razón social fue evolucionando con los tiempos. El sistema es fácil: cuando el préstamo no es devuelto, el bien garante se subasta. Más de 2.500 subastas (empezaron siendo semestrales) se han celebrado ya desde su creación.
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J. Vilaseca
En 1714 solo agua y trozos de tela eran necesarios para hacer papel. Materiales con los que el empresario Vilaseca contaba en la localidad barcelonesa de Capellades para agrupar varios molinos e incorporarse así a la industria papelera. Hoy son más de 600 referencias las que produce, desde los precintos del tabaco, hasta el papel para los cartones de bingo, billetes de lotería u otros timbres oficiales, y su principal cliente es la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Sigue siendo una empresa de capital mayoritariamente familiar, ahora en manos de los Torredemer que la compraron a mediados del siglo pasado.
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Bodegas Alvear
En 1729 Diego de Alvear y Escalera se traslada a Montilla (Córdoba) y construye su ya centenaria bodega. Transmitida de padres a hijos durante años, ha sabido conservar su carácter familiar hasta la actual octava generación. Aunque las técnicas se han ido modernizando, el vino aún conserva ese aroma y sabor tradicionales tan característicos de la tierra. Sus vinos dulces, finos, olorosos y amontillados producidos a base de la peculiar uva Pedro Ximénez gozan de gran prestigio internacional.
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Arcos
Desde 1745 la empresa cuchillera de Albacete ha conseguido adaptarse a todos los cambios que la sociedad y la economía han ido imponiendo con los años. Su negocio de raigambre familiar (ya son ocho las generaciones que la han dirigido) ha sabido administrar adecuadamente la inversión externa. Si empezaron produciendo tijeras y navajas, hoy los cuchillos profesionales y de cocina son el gran mercado que cubren íntegramente desde la capital manchega.
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Goma Camps
Los orígenes de esta industria papelera tarraconense se hallan en el año 1758, cuando se inició en la producción de papel para soporte de documentos oficiales. Abrió sus miras para fabricar papel de fumar y posteriormente tisú (usado en servilletas, papel higiénico o pañuelos). De carácter marcadamente familiar y con casi 400 empleados su expansión internacional es un hecho en países como Francia y Portugal.
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Bodegas Osborne
Fundada en 1772, fecha de origen de sus soleras de vino de Jerez, pronto se convirtió en referente mundial de este tipo de vino. Con la mayoría de su capital en manos de la familia Osborne, la empresa ha creado una imagen y marca que han trascendido las fronteras. La calidad, innovación y el respeto a los métodos tradicionales se han combinado con una acertada diversificación. Así, tras el vino y el brandy se lanzaron al mercado del Rioja (Bodegas Montecillo), de los licores (Anís del Mono) o del jamón de Jabugo (Sánchez Romero Carvajal).
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La Farga Lacambra
Fundada en 1808, esta es una compañía legendaria en la producción industrial de semielaborados de cobre (y sus aleaciones) a partir de materiales reciclados y cátodos de cobre. Sus principales mercados son el ferroviario, el automovilístico, el de tuberías o el eléctrico, entre otros. Aunque se creó en el barrio de la Barceloneta, actualmente está ubicada en la población barcelonesa de Las Masías de Voltregá. Durante muchos años fue una empresa de gestión familiar que hizo de la innovación su motor de movimiento.
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Bodegas Barbadillo
En Sanlúcar de Barrameda tiene su corazón esta bodega originaria de 1821 donde la familia Barbadillo (cuando Benigno Barbadillo y su primo Manuel López se instalan en la localidad) comenzó a embotellar sus primeros vinos manzanilla. Vino de Jerez y brandy que han conseguido con los años ubicarse con prestigio tanto en el mercado nacional como internacional. La empresa ha ido ampliando producto con los años y ahora también está integrada en otras denominaciones como Somontano o Ribera del Duero.
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Bodegas Caballero
Otra empresa vinatera gaditana entre las más antiguas del país. En esta ocasión radica de 1830 cuando José Cabaleiro decidió aprovechar el tirón de las exportaciones hacia Reino Unido y América del vino de la zona, para montar una bodega en la que también se comenzaron a producir bebidas espirituosas. Quizás hoy día, aunque produce diversas referencias, la firma sea conocida sobre todo por su marca más popular, el Ponche Caballero.
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Bodegas González Byass
La bodega jerezana tiene 180 años de historia. En 1835, un joven Manuel María González, asesorado por su tío José Ángel y Vargas –el Tío Pepe que acabó dando nombre al más famoso de los vinos de Jerez–, decidió fundar la bodega a la vista del emergente panorama que para el negocio del vino se presentaba en aquellos tiempos. En poco tiempo alcanzó grandes cifras de ventas. Crucial en esos resultados resultó la labor de Robert Blake Byass, agente de la bodega en Inglaterra, que no dudó en incorporarse como socio de la compañía. Desde entonces no ha dejado de crecer, diversificar producto y ampliar mercado.
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Laboratorios Uriach
La farmacéutica más antigua de España (y segunda de Europa) se creó en 1838 con sede en Barcelona, y desde entonces ha conseguido sortear diversas crisis, reinventarse y superar el reto del tiempo. Biodramina, AeroRed o Aquilea están hoy en la mayoría de los hogares españoles gracias a estos laboratorios. Controlados por la familia del mismo nombre, apuesta por la elaboración de genéricos, medicamentos sin receta y productos naturales. También ha iniciado un importante proceso de expansión internacional.
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Orbea
Los comienzos de Orbea Hermanos, allá por 1840 en la localidad guipuzcoana de Éibar, no estaban ligados precisamente a la producción de bicicletas sino de armas. Se especializaron en el arma corta –desde revólveres de pistón a pistolas– que vendían sobre todo al gobierno. Tras la I Guerra Mundial, la caída del negocio armamentístico les obligó a reinventarse.
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Autobuses Barredo
Al año 1752 se remonta el origen de esta empresa familiar radicada en Burgos y Álava, cuando su fundador, Pedro Fernez de Barredo, puso en marcha el negocio de transporte de mercancías entre Bilbao y Madrid. Trayecto que, valiéndose de los medios de acarreo de la época podía llegar a prolongarse hasta diez días. Hoy, la compañía Autobuses Barredo y Autocares del Zadorra se dedica al alquiler de vehículos y cubre diversos tramos para el transporte de pasajeros por carretera.
Las empresas más antiguas de España
Su dominio de la tubería fue decisivo a la hora de decantarse en 1930 por la fabricación de bicicletas, que aquellos años llegaron a usar algunos de los grandes ídolos del ciclismo español de la época. Hoy es uno de los grandes productores europeos del sector, habiendo ampliado su catálogo a ropa y accesorios.
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