Lo ha anunciado el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, tras el Consejo de Gobierno celebrado este miércoles, que ha aprobado la declaración de interés general de Aragón (DIGA) de esta iniciativa.
Los nuevos centros de datos tendrán un circuito cerrado de refrigeración y se abastecerán con energía renovable y también desde el «enchufe» de Red Eléctrica Española.
Se crearán unos 30.000 puestos de trabajo temporales en total durante la fase de construcción, que durará unos 8 años, y en la fase de explotación serán unos 3.000 los empleos sumando los tres centros de datos.
Azcón ha puesto de relieve la importante capacidad de inversión local que ganarán los Ayuntamientos de estas tres localidades con la fiscalidad, por el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
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