Esta subida de nota de Cores se produce después de que la agencia de calificación crediticia haya elevado el pasado viernes el rating de España a ‘A+’, con perspectiva ‘estable’.
S&P destacó el fuerte crecimiento económico de España, el impacto de la migración y la actividad inversora en el empleo o su «protección» ante las consecuencias por los aranceles de Estados Unidos.
La agencia también subrayó que la «década de desapalancamiento del sector privado ha dado lugar a una notable mejora del balance externo» de España, «reduciendo la sensibilidad de la economía a cambios repentinos en las condiciones de financiación externa y mejorando su resiliencia general ante las crisis económicas». Así, también prevé que el desempleo baje por debajo del 10% en 2028, «un nivel que no se alcanzaba desde 2007».
