El Banco Central de Brasil ha revisado cuatro décimas al alza su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil, al 2,3% desde el 1,9%, fruto del mejor desempeño económico del país en el primer trimestre del año, entre otros.
En concreto, según ha apuntado este jueves la entidad en su informe trimestral de inflación, la actividad económica mostró un ritmo fuerte en el primer trimestre, con un crecimiento del PIB del 0,8% hasta marzo, lo que refleja una robustez «mayor a la esperada».
Además, la mejora de la proyección se ha dado con arreglo a la caída del desempleo y al crecimiento de los salarios, al tiempo que se ha limitado el impacto que tendrán las inundaciones acontecidas en Rio Grande do Sul el pasado mayo en la actividad económica.
«Se espera que los esfuerzos para la reconstrucción de Rio Grande do Sul contribuyan positivamente al crecimiento del PIB en el segundo semestre, sumándose al impacto retardado de la reducción en el grado de ajuste monetario que se produjo durante el último año», recoge el documento.
Desde el lado de la oferta, se espera una mayor caída de la actividad agropecuaria, pasando de una contracción del 1% al 2%, debido principalmente a una menor producción agrícola, notablemente en los cultivos de soja y maiz.
Por el contrario, la proyección para el sector secundario se elevó, pasando del 2,2% al 2,7%. Lo mismo sucede con el sector servicios, que pasó del 2% al 2,4%, destacando el incremento en el área de comercio, bastante influenciada por el fuerte crecimiento del consumo de las familias.
INFLACIÓN EN EL 4%
Por su parte, el Banco Central de Brasil ha empeorado su pronóstico respecto a la inflación para este año, con un aumento de 0,5 puntos porcentuales en relación con el informe divulgado en marzo. Así, espera que 2024 cierre con un índice de precios del 4%, frente al 3,5% que calculaba con anterioridad.
De igual forma, se ha revisado al alza la inflación esperada en 2025, cuando se situará en el 3,4%, dos décimas por encima de lo esperado el pasado marzo.
El aumento de la proyección de inflación resulta principalmente de la actividad económica más fuerte de lo esperado, que dio lugar a un aumento de la brecha de producción estimada, pero fue contenida por el aumento de los tipos de interés.
El aumento de las expectativas de inflación, la depreciación del tipo de cambio, la inercia en aumentar la proyección de corto plazo también contribuyeron al aumento de la proyección.