Fundación Confemetal y la Asociación de Empresarios del Metal de Valladolid (Vametal), en colaboración con el grupo Aspasia, han iniciado un itinerario para 15 jóvenes a los que se les formará como soldadores especializados en estructuras metálicas, en el marco del modelo de formación dual vinculada al contrato de formación en alternancia.
Según ha explicado la patronal del metal en un comunicado, esta iniciativa tiene como objetivo paliar la falta de mano de obra que sufre el sector del metal en determinados perfiles profesionales, como el de soldador.
Al finalizar su contrato de formación en mayo de 2025, se proporcionará a los jóvenes un título oficial de certificado de profesionalidad. El contrato, en el que está incluida la formación, se remunerará desde el primer día.
Mediante este modelo de contrato destinado a jóvenes desempleados menores de 30 años sin cualificación previa en los puestos de trabajo demandados por las empresas, se combina la formación con el trabajo remunerado, con la posibilidad de cubrir la demanda de contratación en determinados perfiles profesionales difíciles de encontrar en el mercado laboral actual.
El proyecto se está impulsando para otros puestos de trabajo y actividades del metal en distintas provincias, con la finalidad de formar a las personas para suplir futuras jubilaciones y paliar los problemas que existen para cubrir vacantes por falta de mano de obra cualificada.
Los itinerarios formativos se realizan a medida según los puestos a cubrir, teniendo una duración mínima de tres meses y máxima de dos años.
La empresa se beneficia de importantes ayudas económicas. La formación puede estar bonificada al 100%, obteniendo, además, importantes reducciones en las cotizaciones a la Seguridad Social.
Al finalizar el contrato la empresa decide, sin ningún tipo compromiso y si los resultados son los esperados, si mantiene su compromiso con el trabajador mediante contrato indefinido o da por finalizada su relación laboral.
Confemetal ha destacado que con esta iniciativa «todos ganan»: la empresa obtiene una formación adaptada a los puestos de trabajo que necesita, a través de aprendices «cualificados y motivados», y los aprendices obtienen unos estudios oficiales gratuitos y un conocimiento temprano del entorno sociolaboral, con una remuneración proporcional al tiempo de trabajo desde el primer día.