Tras registrar Rusia la primera vacuna contra el Covid la pasada semana, este lunes China ha registrado en su oficina de Propiedad Intelectual una de sus propuestas de vacuna. Según han informado, el proyecto se encuentra en la última fase de pruebas antes de la implantación.
La biofarmacéutica china CanSino Biologics ha realizado las pruebas con militares del ejército chino, y países como Arabia Saudí, Rusia, Brasil y Chile se han ofrecido para llevar a cabo las últimas pruebas.
Según el diario Southern Metropolis en palabras de la farmacéutica, “la patente es una garantía que confirma la eficacia y seguridad de la vacuna”. Según el comunicado emitido por CanSino, están preparados para su producción masiva, sin especificar fechas, por ser “rápida y fácil” y puede inducir al cuerpo “a generar una fuerte respuesta inmune celular y humoral en poco tiempo”.
Con la finalidad de introducir en las células humanas información genética del nuevo coronavirus, la vacuna utiliza Adenovirus tipo 5, Ad5-nCoV (un adenovirus del resfriado común). Las vacunas experimentales se prueban en células humanas y animales a través de tres fases. En la fase 1, se le aplica la vacuna a decenas de voluntarios sanos con la finalidad de descartar efectos graves. En la fase 2 se continúa el estudio en un grupo más numeroso de personas, y los científicos vigilan los efectos adversos, analizan las defensas generadas y calculan la dosis adecuada. En la fase 3, que es la última, se confirma la fiabilidad con decenas de miles de participantes, para poder demostrar que la vacuna es realmente segura y eficaz.
