El interés por el dinero virtual se ha disparado en los últimos años. Crecen los pequeños inversores y las grandes firmas institucionales que ponen su foco en las criptomonedas. Sin embargo, una vez que nos hemos decidido a invertir en bitcoin, Ethereum, Ripple u otras, es importante conocer algunas obligaciones que les son de aplicación.
El director general de TaxScouts en España, Jaume Suñol, destaca que a nivel nacional todavía se carece de un marco legal concreto que regule el mercado de las criptomonedas, pero «la inversión en este tipo de activos sí tiene consecuencias fiscales muy definidas«.
En este sentido, desde la plataforma subrayan que la compra de criptomonedas no implica la obligación de pagar impuestos, si no que la obligación surge cuando se venden (lo mismo que pasa con las acciones). Así pues, si no se hace ningún movimiento de las criptomonedas, no se tributa, ya que no hay ganancia ni pérdida, suban o bajen de valor.
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Declaración de la renta 2021
Tanto si conviertes tus criptomonedas a euros como si las conviertes a otra criptomoneda, la pérdida o ganancia que genere esa transacción es lo por lo que se tiene que pagar IRPF en la declaración de la renta. Para ello, tienes que calcular la diferencia entre el valor de venta menos el valor de compra.
Estas operaciones, que tienen la consideración de ganancia o pérdida de patrimonio, se deben incluir en la casilla 389 de la declaración de la renta, en el apartado Otras ganancias patrimoniales a integrar en la base imponible del ahorro.
En la declaración de la renta se incluyen las ganancias o pérdidas obtenidas entre el uno de enero y el 31 de diciembre del año anterior, en este caso de 2021, por lo que la fintech aconseja tener un listado con las operaciones realizadas con criptomonedas para saber cuál es el importe a declarar. Si desconoces esta información, puedes solicitar a tu bróker o exchanger que te facilite esta información.
Las ganancias tributan por tramos. ¿Y las pérdidas?
¿Cuántos impuestos se pagan por las criptomonedas? Las ganancias patrimoniales tributan según los siguientes tramos:
- Por los primeros 6.000 euros ganados se paga un 19%.
- De 6.001 a 50.000 euros de ganancias un 21%.
- De 50.001 a 200.000 euros ganados un 23%.
- A partir 200.001 euros de ganancias un 26%.
Si por el contrario, la venta de tus criptomonedas te ha supuesto una pérdida, debes tener en cuenta que estas pérdidas patrimoniales se compensan con las ganancias derivadas de otras transmisiones, y si el resultado global es de pérdida, se podrá compensar hasta el 25% con las ganancias de los rendimientos del capital (si no hubiera ganancias no podrías compensarlo).
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Impuesto sobre el Patrimonio
El impuesto sobre el patrimonio se aplica no sobre las transacciones, sino directamente sobre el patrimonio. Así, en el caso de tener la obligación de presentar este impuesto, se deberá incluir el valor de las criptomonedas en el momento de la declaración del impuesto y pagar según el tipo aplicable.
Cabe destacar que la normativa del impuesto varía según la comunidad autónoma en la que se resida: los mínimos exentos cambian y existen bonificaciones que llegan al 100%.
Modelo 720
Existen dudas sobre si es obligatorio declarar las criptomonedas mediante el modelo 720, un modelo informativo por el que hay que declarar los bienes y derechos situados en el extranjero cuando la suma de estos sea superior a 50.000 euros, pero que no se creó para este fin especificamente.
No obstante, TaxScouts recomienda presentarlo en el caso de que el valor de tus criptomonedas (o la suma de criptomonedas con fondos o valores depositados en entidades financieras situadas en el extranjero) a fecha 31 de diciembre de 2021 superase los 50.000 euros.
El plazo de presentación del modelo es del uno de enero al 31 de marzo de 2022, por lo que si desconocías esta información todavía estás a tiempo de hacer los trámites a través de la Agencia Tributaria.
Otras obligaciones fiscales
Las obligaciones fiscales en el caso de que se obtengan ingresos por el minado de criptomonedas son diferentes a las de la inversión. En este caso, se trata de una actividad económica y se asimila a cualquier otro trabajo por cuenta ajena, por lo que hay que darse de alta como autónomo y cumplir con las obligaciones que se aplican a este tipo de trabajadores.
Más impuestos, menos inversión
El 30% de los españoles afirma que dejaría de invertir en criptomonedas si aumentase la presión fiscal sobre estos activos, en tanto que el 54% de los inversores no las tienen en cuenta a la hora de realizar su declaración de la renta. Además, el 15% de ellos querría incluirlas en su declaración de impuestos.
El 56% de los españoles cree que las criptomonedas se deberían declarar en el país donde se encuentra el inversor, frente al 21,5% que optaría por hacerlo en el lugar desde el que se realiza la transacción, según los datos recogidos por Europa Press del Informe sobre la Declaración de la Renta y Política Fiscal Española elaborado por TaxScouts.