Llegaron a España hace solo tres años para innovar en la movilidad sostenible y lo están consiguiendo. No espere comprar un coche como una vez lo hizo. El revolucionario concepto de un Club desbanca al tradicional concesionario como un lugar donde tomar café, teletrabajar, o comprar productos ´cool´ todos sostenibles además de conducir su modelo 01 y acercarse a las últimas novedades de la marca. La apertura del Lynk & Co Club en la zona más deseada de la Gran Vía de Madrid marca un hito significativo para la compañía, allí recibe a Forbes su CEO Nicolas López Appelgren, cinco meses en el cargo y 28 años en la industria creando experiencias al cliente y nuevos modelos de negocio.
¿Cuál es el concepto de estos Clubes y cómo van más allá de los concesionarios tradicionales para crear una experiencia inmersiva entre los consumidores?
«España, en primer lugar, es un mercado muy importante para nosotros. Es uno de los principales entre los siete en los que operamos. El concepto del Club es bastante diferente al de un concesionario tradicional, aquí es realmente es donde la marca cobra vida. Son espacios pensados para sumergirse en la marca, entender en qué consistimos y permitir que las personas se conozcan y conecten realmente. Por eso elegimos muy cuidadosamente los espacios o ubicaciones en los que estamos. Y después de haber lanzado el primer Club en Barcelona, en 2022, pensamos que Madrid era el siguiente paso natural para expandirnos en el mercado español.
¿Cuál es el papel de los Clubes en la estrategia de marca? ¿Qué quieren lograr con esto?
Hay muchas marcas nuevas entrando en Europa, como hemos visto, mayoritariamente desde China, pero también de otros lugares, como Tesla, de EE.UU. y otras marcas de otros mercados. Hay muchos coches geniales disponibles. Nada se parece a hace 20 años cuando generalizando tenías coches malos y coches buenos. Hoy en día, hay muchos coches geniales disponibles, lo que hace extremadamente importante destacar entre la multitud, tener una marca fuerte y construir una historia alrededor de tu marca. Hoy no se puede construir una historia solo con el coche, porque la competencia es feroz.
¿Cuál la historia que están construyendo alrededor de la empresa?
Estamos construyendo una comunidad. Somos una empresa que ingresó al mercado centrándonos en gran medida en la suscripción, en una nueva forma de tener un coche. Y hasta ahora, el enfoque ha sido mucho sobre la suscripción, lo que significa que pagas una tarifa mensual fija y luego puedes dejar el coche cuando quieras. Por lo tanto, nuestra historia está relacionado con la flexibilidad, la facilidad de propiedad, la facilidad de compra, pero también en compartir, algo muy nuestro, cuando no usas tu coche, puedes compartirlo con la comunidad, aportamos eso y grandes coches.
Los Clubes Lynk & Co reflejan el ánimo local, ¿cómo contribuyen al ethos de la compañía?
Si queremos hacer comunidad tenemos que conectar con el alma de la ciudad y con la comunidad local y por ello buscamos marcas con ideas similares a la nuestra sobre diseño,inclusión, diversidad y sostenibilidad y buscamos colaboraciones. Así que por ejemplo en este espacio tienes marcas como Velca, SAYE, NWHR, OWL, Melanjey Piece With Artist, libros locales, ropa hecha con paracaídas, bicicletas eléctricas, todo hecho aquí.… buscamos colaborar para también atraer a un público similar y urbano.
¿Cómo refleja la apertura del Club el compromiso de la marca con el mercado español?
Somos serios en nuestra apuesta por España. El hecho de que estemos en Barcelona es genial, pero tener realmente una huella en la capital, Madrid, creíamos que era necesario para mostrar realmente que estamos aquí para quedarnos. Hace poco hemos abierto una base regional de vehículos en el puerto en Barcelona lo que nos permite enviar los coches directamente desde nuestras fábricas en China a España. Lo cual también, yo diría, es un gran compromiso no solo para el mercado español, sino también para los mercados vecinos como Francia e Italia.
¿Cuáles son las características clave de sus coches en términos de sostenibilidad y tecnología, y cómo explicarían cómo se destaca Lynk & Co de los demás?
Creo que tenemos un sistema híbrido enchufable muy avanzado. No estamos solos en el negocio de los híbridos enchufables, pero nuestro sistema es extremadamente técnico y tiene una gran autonomía de hasta 70 km en modo eléctrico. Y luego tenemos un motor de gasolina muy eficiente para complementarlo. También tenemos muchos materiales renovables en el coche. Los asientos, por ejemplo, están hechos de redes de pesca recicladas. Hemos pensado mucho en los materiales que ponemos en el coche. Tenemos un sistema de info entretenimiento muy avanzado, muchas aplicaciones a bordo y mucha diversión en el coche, lo que nos hace un poco diferente en el mercado. Y luego, por supuesto, un diseño hermoso y coches de buena calidad para obtener gran satisfacción de nuestros clientes.
La idea de compartir, ¿cómo contribuye a reducir los costos y también a ser más sostenible?
La huella de CO2 en la producción de coches es bastante alta. Y luego, por supuesto, tienes las emisiones de la combustión cuando usas el motor de gasolina. Si coges la cantidad de coches que produces y los pones en circulación compartiéndolos estás haciendo que más personas los conduzcan en lugar de comprar otro coche, eso reduce la huella general de CO2. Básicamente, porque también reduces el CO2 que sale de las fábricas al construir los coches. Desde un punto de vista financiero para los clientes, es una oportunidad para ganar dinero. El 95% aproximadamente del tiempo tu coche está parado, ya sea en el trabajo, en casa o donde esté estacionado. Con Lynk & Co puedes capitalizar eso compartiendo el coche con terceros por una tarifa ytambién hay un beneficio financiero para los clientes. Por lo tanto, es una situación beneficiosa tanto para el medio ambiente como para el bolsillo.
¿Cree que este modelo de compartir coche va a imponerse en el mercado?
Es difícil saber qué deparará el futuro, pero será cada vez más común. Las generaciones más jóvenes están más abiertas a compartir en general, como la ropa de segunda mano. Creo que será una ventaja competitiva. Me alegra haber sido los primeros en integrar este modelo completamente en nuestros coches, es un punto muy fuerte para nuestra compañía.
¿Cómo equilibran las altas expectativas de una generación joven, que quiere lo último y lo más completo y el complejo escenario económico?
En Lynk & Co estamos muy enfocados en una oferta muy específica, básicamente hasta ahora hemos tenido un producto, negro o azul. Eso nos ha servido bien para atraer a un público joven y entrar en el mercado. Ahora estamos establecidos en España como segundos Plug-In Hybrid, en el segmento C-SUV. Cada vez más clientes nos demandan formas más convencionales de comprar un coche u obtener un préstamo bancario. Así que nos expandiremos a nuevos canales de venta. Vamos a tener también más modelos, durante el otoño, introduciremos nuestro primer vehículo eléctrico en Europa y nos expandiremos al 20% del mercado que nos queda en Europa. La suscripción seguirá siendo una parte importante de la estrategia porque queremos que comprar coches sea flexible y fácil, pero no queremos decirles a los clientes como tienen que comprar nuestros coches sino queremos asegurarnos de presentar una serie de oportunidades, y que ellos decidan lo que mejor les conviene.
¿Cómo ve la transición de los vehículos híbridos y eléctricos a los vehículos autónomos?
Es algo revolucionario si lo piensas. La industria automotriz ha sido prácticamente la misma durante cien años. Un coche con un motor de combustión, lo compras en el concesionario. Ahora está cambiando todo. Si empiezas con la conducción autónoma, creo que la inteligencia artificial es crucial. Es ahí donde se está poniendo mucho desarrollo en la industria, el aprendizaje automático, ¿cómo puedes hacer que los coches se vuelvan inteligentes. Esa es probablemente la aplicación más importante para la IA en la industria automotriz actualmente. En términos de uso, carga inteligente, navegación, todo eso se volverá más fluido, el coche va a saber qué tipo de teléfono tienes en el bolsillo y se conectará fácilmente. Otra cosa es la conducción autónoma es probablemente la más difícil de resolver ahora en la industria automotriz.
¿Cómo va a cambiar la industria con los nuevos fabricantes y los ya establecidos?
Vamos a ver una reorganización y una consolidación. Creo que es bueno que llegue el pensamiento innovador de los recién llegados para agitarla. A los japoneses llevó 20 años establecerse en Europa, a los coreanos diez años y a los chinos les llevará cinco años. Es simplemente mucho más rápido. Dicho esto, hay también demasiadas nuevas marcas. Así que creo que habrá una consolidación y algunas simplemente no sobrevivirán. Y lo mismo sucederá en el lado más tradicional con empresas con mucha presión, veremos fusiones o creación de grupos de varias compañías para hacer frente a la competencia.
¿Cómo ve a España desde el punto de vista del consumidor?
España es un gran mercado de automóviles y un gran productor, es un mercado también muy enfocado al renting, la suscripción que ofrecemos es más flexible y lleva ese modelo al siguiente nivel. Somos una opción también para los centros de las ciudades con limitaciones porque nuestra oferta es de coches sostenibles, definitivamente es un mercado importante.
¿Es suficiente la infraestructura de carga del país?
Ese es un punto importante, si no tienes una infraestructura, es difícil vender, y si más vendes más las empresas eléctricas instalan más, es como la pescadilla que se muerde la cola. Es evidente que el sur de Europa está detrás del norte en términos de infraestructura, donde los gobiernos han destinado más ayudas a construir la infraestructura primero. Y ahí es donde un mercado como España está un poco atrás. Hay un trabajo por hacer.
Lynk & Co es propiedad junto con Volvo y otros del fabricante y gigante chino Geely, ¿cómo afecta la geopolítica a la industria automotriz con tensiones, por ejemplo, entre Estados Unidos y China?
Es un entorno difícil, sabemos que la Unión Europea impondrá algún tipo de aranceles para los coches producidos en China, que ahora es del 10% y puede ser del doble, lo sabremos en junio. Esto nos influye, pero creo que como la mayoría de los grandes fabricantes reaccionaremos rápido. Necesitaremos actuar en función de cómo cambian las cosas y básicamente, producir en Europa si es necesario. Es parte de la selección a la que nos enfrentamos porque obviamente las marcas y las empresas más débiles no podrán hacer eso. Las tensiones comerciales no se van a detener, en Estados Unidos parece claro que los aranceles de importación desde China aumentarán aún más de lo que dicen. No importa quién gane las elecciones en Estados Unidos, la especie de guerra de aranceles continuará y también en Europa. Es un tema importante en nuestra agenda.