Immoral Marketing, liderada por Marco Sapiña, quiere ser sinónimo de honestidad y utilidad social. (Foto: Pep Escoda)
El marketing es un terreno en constante evolución, pero que a veces puede resultar opaco para quienes no transitan por él. Esto es lo que motivó hace unos años a Marco Sapiña a fundar ADMK Team: una agencia que priorizara la transparencia y los resultados.
Después, el carácter líquido del negocio llevó a este emprendedor acometer un rebranding. Sapiña sentía que su identidad no capturaba del todo la esencia de lo que deseaban ser. Así surgió la idea de Immoral Marketing.
El nombre de la marca resulta muy llamativo, pero trata de expresar lo contrario a lo que sugiere. El emprendedor buscaba revertir la percepción negativa que generalmente se tiene de este mundo, para transmitir una visión de honestidad y un marketing útil para la sociedad.
Immoral ha creado un concepto al que han llamado branformance growth. Se define como una fusión entre el branding –centrado en la construcción de la identidad de una marca–, y el performance –enfocado en la eficacia de estrategias específicas–, ‘sazonados’ también con la innovación y la experimentación.
Combinando estos aspectos, Immoral pretende construir marcas poderosas y efectivas. El ejemplo más destacado es el propio rebranding de ADMK Team a Immoral Marketing.
El avance tecnológico, especialmente la inteligencia artificial, ha transformado cómo Marco y su equipo abordan el marketing. En Immoral han invertido tiempo en usar herramientas como ChatGPT para automatizar tareas, analizar datos y mejorar la atención al cliente. Para el emprendedor, la IA destaca por personalizar la experiencia del cliente y potenciar el crecimiento empresarial. Pese a que va de la mano con las tecnologías más disruptivas, Sapiña insiste en que conservarán sus valores fundamentales. Su deseo es que siga siendo una agencia que inspire confianza y motive a las marcas para generar un impacto positivo en la sociedad.