Crecimiento, liderago en satisfacción, consolidación como la entidad líder en asesoría financiera… En un momento en el que la coyuntura ha puesto en jaque a muchas entidades, Banco Mediolanum se ha consolidado como uno de los bancos más fuertes y con mayor potencial del sector.
Su estrategia, enfocada a ayudar a sus clientes a lo largo de todo el ciclo financiero de su vida, esta liderada desde hace cuatro años por su CEO, Igor Garzesi.
PREGUNTA. Pese a la dificil coyuntura de los últimos años, habéis vivido vuestra época de mayor crecimiento. ¿Cuál ha sido el secreto?
RESPUESTA. La clave ha sido mantenernos fieles al propósito con el que se creó Mediolanum: ser útiles a todas las familias a través de un asesoramiento de calidad que les impulse a lograr sus metas financieras. Este foco en las personas nos ha posicionado en estos últimos cuatro años como la primera red de asesores financieros de España, con más de 1.650 Family Bankers, más de 220.000 clientes y casi 10.000 millones de euros de patrimonio que nos han confiado.
P. Este es su quinto año como consejero delegado de la entidad. ¿Cuál es el balance?
R. Han sido unos años muy complejos. Hemos tenido que afrontar la pandemia, los tipos de interés negativos, la guerra de Ucrania, la inflación y, por si fuera poco, la vertiginosa subida de los tipos de interés… Pero es precisamente cuando el contexto es desfavorable cuando más relevante es nuestra labor. Estar al lado de todos nuestros clientes dándoles un asesoramiento de calidad.
P. ¿Y cómo conseguís que esa confianza se mantenga en el tiempo?
R. La clave es el asesoramiento financiero a lo largo del ciclo de vida de las familias. Somos un banco completo, con todos los servicios: cuentas, tarjetas, créditos, seguros y productos y servicios de ahorro e inversión. La diferencia la marca el Family Banker, que ofrece un asesoramiento personal, siempre disponible, en persona, videollamada, teléfono o WhatsApp.
P. Habéis alcanzado importantes puestos en los índices de satisfacción. ¿Cómo trabajáis por mejorar en ese sentido?
R. Ya son cuatro años con los clientes más satisfechos del sector, según el estudio que elabora la consultora independiente Stiga. Para nosotros esta es la mejor prueba de que nuestra forma de hacer banca responde a sus necesidades, sobre todo gracias a nuestros asesores. Las decisiones económicas tienen un fuerte componente emocional, y por eso una visión externa de un profesional es especialmente relevante.
P. Una de las claves tanto ahora como en el futuro del sector bancario es la tecnología. ¿Cómo se compagina eso con el trato personal?
R. Hemos ido sumando las diferentes herramientas a medida que surgen como internet, las apps, etc. Y seguimos haciéndolo también ahora con la inteligencia artificial, pero sin renunciar en ningún momento al factor humano, porque nunca olvidamos que los clientes son personas que necesitan hablar con otras personas para entender, decidir y estar tranquilos.
P. Lo que está claro es que Banco Mediolanum ha pasado a otra fase. ¿Qué podemos esperar para el futuro de la entidad?
R. El banco crecerá robustamente las próximas décadas porque nuestra capacidad de dar asesoramiento personalizado y multicanal hace que cada vez seamos más importantes para los clientes. Por eso, para dar respuesta a ese gran crecimiento, estamos inmersos en un intenso proceso de selección para incorporar profesionales que nos permitan asesorar a más familias.