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El deporte en grupo se consolida como antídoto frente a la soledad en España

Datos del Observatorio GO fit muestran que uno de cada tres usuarios de centros deportivos entrena acompañado, en un contexto marcado por el aumento de la soledad no deseada.

SERVIMEDIA

El deporte en grupo gana peso como herramienta de socialización y lucha contra la soledad, según los últimos datos del Observatorio GO fit, que ha analizado los hábitos de más de 18.000 personas en centros deportivos de toda España. El estudio revela que el 32% de los usuarios entrena acompañado, ya sea con amigos o familiares, lo que refuerza el papel del ejercicio físico como espacio de relación social.

En concreto, el 10,62% de los usuarios acude a entrenar con amigos, mientras que el 21,59% lo hace con familiares, una tendencia que apunta a la consolidación del deporte como un punto de encuentro más allá del ámbito puramente físico.

Estos datos se han dado a conocer con motivo del Día Internacional contra la Soledad No Deseada y se enmarcan en un contexto preocupante: una de cada cinco personas en España (20%) afirma experimentar soledad no deseada, según el Observatorio Estatal de la Soledad No Deseada. De ellas, dos de cada tres aseguran llevar más de dos años en esta situación, lo que evidencia el carácter persistente del problema.

El informe de GO fit también subraya la importancia de las actividades dirigidas como entornos de socialización. El 42% de los usuarios participa de forma habitual en este tipo de actividades y otro 23% lo hace de manera ocasional, lo que refleja la demanda de espacios colectivos dentro de los centros deportivos.

La compañía señala que durante el último año se impartieron más de 205.000 sesiones de actividades en grupo, con un total de 5,5 millones de asistentes, cifras que ponen de relieve el alcance y el impacto social de estas prácticas.

Para el vicepresidente de GO fit, Alfonso Arroyo, la práctica deportiva “va más allá del ejercicio físico” y se convierte en una oportunidad para “compartir momentos, fortalecer vínculos y crear nuevas relaciones”. A través de las actividades y los espacios comunes, explica, “se fomentan encuentros que ayudan a combatir la soledad”, un aspecto especialmente relevante en colectivos más vulnerables, como las personas mayores.

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