Las principales capitales españolas, como Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia, ya han desplegado sus escaparates navideños para encarar uno de los momentos más estratégicos de la campaña anual. Un periodo decisivo en el que moda, retail y sector del lujo, de la mano de la alta joyería y relojería, afrontan una fase clave en ventas.
Madrid y Barcelona continúan siendo los grandes referentes del lujo en España. Sin embargo, otras capitales como Sevilla, Valencia o Málaga han logrado consolidar una propuesta premium cada vez más atractiva, capaz de seducir a un consumidor exigente y de dinamizar el mapa nacional del retail de alta gama.
Los escaparates se convierten, según expertos en tendencias, en un lenguaje propio donde las firmas despliegan imagen de marca, creatividad y artesanía, elementos diferenciales en un sector altamente aspiracional.
De acuerdo con un informe reciente sobre la evolución del sector, elaborado por Global Blue, el gasto en artículos premium crece en España por encima de la media mundial. Este crecimiento consolida a las capitales españolas dentro del circuito europeo del lujo, solo por detrás de ciudades como París o Milán en determinados segmentos.
Este fenómeno no solo se refleja en el dinamismo de Madrid y Barcelona, sino también en la emergencia de ejes comerciales premium en ciudades como Valencia, Sevilla o Málaga, donde el turismo internacional y la inversión de marcas globales están transformando la oferta comercial.
En Madrid, el epicentro vuelve a situarse en la Milla de Oro, donde las principales firmas de alta joyería y relojería despliegan sus propuestas para Navidad. Casas como Chopard, Cartier o Tiffany & Co. apuestan por piezas que combinan tradición y exclusividad, mientras firmas nacionales como Rabat destacan por joyas concebidas para trascender en el tiempo.
En la capital catalana, Paseo de Gracia se reafirma como el gran eje del lujo, reuniendo firmas de moda como Versace y Louis Vuitton, junto a referentes de la alta joyería como Bvlgari, Rabat o Chopard, en un entorno marcado por la iluminación navideña que realza el modernismo entre La Pedrera y Casa Batlló.
Sevilla también afianza su posicionamiento, y aunque cuenta con menos superficie dedicada al lujo, su triángulo comercial formado por Tetuán, Sierpes y La Campana se ha consolidado como el principal escaparate para las firmas premium en la ciudad.
En Valencia, el foco se sitúa en el entorno de la calle Colón y Poeta Querol, donde se ubica la conocida milla de oro valenciana, que reúne joyerías históricas, boutiques de alta gama y espacios emblemáticos.
La Navidad se confirma así como una ventana estratégica para la moda de gama alta, los complementos y la joyería. Distintos análisis del sector coinciden en que es uno de los periodos de mayor intensidad para el comercio del lujo en España, impulsado por el turismo internacional y el crecimiento sostenido del comprador nacional.
