La sanción anunciada por Bruselas responde también a otras irregularidades castigadas por la DSA como la falta de transparencia en su repositorio de anuncios y el incumplimiento de su obligación de permitir acceso a datos por parte de los investigadores.
«Engañar a los usuarios con marcas de verificación, ocultación de información en los anuncios o excluir a los investigadores son prácticas que no tienen cabida en Internet en la UE», ha avisado la vicepresidenta de Soberanía Tecnológica, Seguridad y Democracia, Henna Virkkunen, en un comunicado tras conocerse la multa.
La decisión de multar a X llega tras la investigación iniciada desde que Elon Musk adquirió la red social, modificando las normas internas de moderación. La multa supone aproximadamente el 5,4 % de los ingresos globales de la compañía, y aunque no alcanza el máximo permitido por la DSA, es la primera sanción de este tipo aplicada bajo esta normativa. Además, la Comisión ha dado a X seis días para informar sobre las medidas que tomará y 90 días para implementarlas. La medida se produce en un contexto de presión política internacional, con comentarios críticos de funcionarios estadounidenses como JD Vance y Marco Rubio, que cuestionaron la sanción por considerarla una amenaza a la libertad de expresión.
Paralelamente, la Comisión Europea mantiene dos investigaciones adicionales abiertas sobre X: una sobre el manejo de contenidos ilegales, como terrorismo, y otra sobre su sistema algorítmico. Según fuentes comunitarias, los cambios requeridos no implican modificaciones dramáticas en el funcionamiento del sistema de verificación ni en la base de datos de anuncios, y la empresa debería poder implementarlos con relativa facilidad. La multa se enmarca también en la estrategia de Bruselas de aplicar sanciones moderadas bajo la DSA y la Ley de Mercados Digitales (DMA), manteniendo la capacidad de “escalar” en caso de incumplimiento más grave.
