Las administraciones de loterías atraviesan un momento delicado por la pérdida continuada de rentabilidad, tras más de veinte años sin que se actualicen los precios de los productos que venden. Esta situación ha llevado a las principales asociaciones del sector a exigir a Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) una serie de medidas urgentes, entre ellas, una revisión al alza de los precios, un aumento en las comisiones que reciben por el sorteo de Navidad y un plan de impulso para modernizar el producto.
Borja Muñiz, presidente de la Agrupación Nacional de Asociaciones Provinciales de Administradores de Lotería (Anapal), señala a El Economista que la actualización de precios es imprescindible, pero que debe venir acompañada también de un ajuste en los premios.
Según sus planteamientos, el décimo de los sorteos de los jueves debería pasar de 3 a 5 euros; el de los sábados, de 6 a 10 euros; mientras que los sorteos especiales se mantendrían en 15 euros. En cuanto a los grandes sorteos como el de Navidad y El Niño, proponen que el precio del décimo aumente de los actuales 20 a 25 euros.
Además, Anapal reclama que las comisiones para las administraciones de lotería en el sorteo navideño se equiparen a las del resto del año, pasando del 4,5% al 6%. A pesar del estancamiento de tarifas desde principios de los años 2000, SELAE cerró 2024 con cifras récord, logrando un beneficio neto de 2.437 millones de euros, un 11,3% más que el año anterior.
En la misma línea se manifiesta la Asociación para la Defensa Digital de la Lotería (Dedit), que representa a puntos de venta que operan exclusivamente con lotería. Aunque no especifican cifras concretas, esta organización también exige una actualización tanto de precios como de comisiones, además de defender el derecho de los puntos de venta a mantener sus propias plataformas digitales para la venta online.
