Había indicios de que algo importante podría suceder hoy. Es decir, si uno confiaba en las publicaciones del presidente Trump en redes sociales. Temprano por la mañana, escribió en Truth Social: «Tranquilo» y «Este es un buen momento para comprar». Obviamente, no mucha gente le dio mucha importancia.
Esta vez, al menos, hubiera sido prudente tomar literalmente su publicación en las redes sociales.
A la 1:20 p. m., Trump anunció una pausa de 90 días en los aranceles, excepto los que aún se aplicaban a China. A las 2 p. m., el índice S&P 500 había subido más del 7 %. Terminó la jornada con una ganancia del 9,5 %, la tercera mayor ganancia diaria desde el año 2000. (El promedio industrial Dow Jones subió un 7,9 %, mientras que el Nasdaq subió un 12,2 % ese día).
Ese tipo de movimiento es poco común. Desde el año 2000, el índice S&P 500 solo ha tenido una ganancia diaria superior al 5% en 18 ocasiones hasta hoy. Cada uno de esos picos anteriores se produjo en respuesta a una crisis. Muchos no indicaron que todo estaba bien.
Una gran ganancia como la de hoy puede ser una finta. En 2008, el S&P registró siete ganancias diarias superiores al 5% entre septiembre y diciembre, al menos una en cada mes durante ese periodo. Pero el mercado no tocó fondo hasta marzo del año siguiente. El S&P 500 registró dos subidas más del 5% durante ese mes.
En retrospectiva, uno de esos repuntes se produjo en enero de 2001, durante el desplome de las puntocom. Dos más se produjeron en julio de 2002, cuando el pánico por el fraude corporativo, desatado por el colapso de Enron el año anterior, finalmente se calmó. El mercado no tocaría fondo hasta marzo de 2003.
Más recientemente, se produjeron cinco días más de fuertes subidas en la primavera de 2020. Esto ocurrió tras la llegada de la COVID-19 y la Reserva Federal intervino para apuntalar los mercados recortando los tipos de interés e iniciando una nueva ronda de flexibilización cuantitativa. Este repunte resultó duradero, ya que el mercado se recuperó prácticamente sin cesar hasta enero de 2022.
El mega repunte más reciente antes de hoy tuvo lugar en noviembre de 2022, cuando la inflación mostró señales de desaceleración por primera vez tras la pandemia y la posterior respuesta de la Reserva Federal. Las acciones subieron un 5,5 % con un solo dato del Índice de Precios al Consumidor (IPC). El repunte se desvaneció en semanas y el mercado tardó otros seis meses en alcanzar nuevos niveles.