Una de las principales y cada vez más crecientes preocupaciones de los últimos días se ha centrado en la sismología del Teide, el volcán tinerfeño. Su creciente actividad y aumento continuado de emisiones de gas ha hecho sonar las alarmas, especialmente a los ciudadanos de la isla canaria. ¿Podría entrar en erupción el Teide en un futuro cercano? Luca D´Auria, director del Área de Vigilancia Volcánica del Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN), ha declarado a El Confidencial que “no hay duda de que estas anomalías existen desde el año 2016 en Tenerife, sin embargo, a día de hoy no hay razón para alarmarse, nada hace indicar que vaya a haber una erupción en el corto plazo”.
En sí, y tal y como ha expresado D’Auria, «la probabilidad de que haya una erupción este año sería como del 2%, en los próximos 5 años, del 40%, y en 100 años, superaría el 90%«. Sin embargo, los expertos han tomado esta situación como una prioridad, por lo que estarán en constante observación de su seguimiento y evolución, ya que «es solo una especulación, luego puede pasar cualquier cosa”, recalcó el director de INVOLCAN al mismo diario.
Los expertos señalan dos posibles escenarios previos a una erupción volcánica: un aumento gradual en la intensidad de los terremotos hasta llegar a la erupción o, como ocurrió en La Palma, la aparición repentina de una sismicidad intensa pocos días antes. Sin embargo, lo más común sería una progresión paulatina de los movimientos sísmicos. Ante esta situación, el Gobierno de Canarias ha llamado a la calma y trabaja junto a INVOLCAN y el Instituto Geográfico Nacional en la monitorización constante de la actividad volcánica y sísmica, además de desarrollar estrategias de prevención y divulgación.
Manuel Miranda, consejero de Política Territorial de Canarias, afirmó que los científicos del PEVOLCA no prevén una erupción en las próximas semanas o meses, aunque recordó que, inevitablemente, «el archipiélago tiene un origen volcánico». De momento, Tenerife y sus ciudadanos mantienen la calma, pero aún así, están muy atentos a cualquier novedad o cambio en su volcán.