La conocida como ‘la ciudad de las estrellas’ está sufriendo una oleada de incendios imparable que ya se describe como uno de los peores diez incendios de la historia de Estados Unidos. Activo desde el pasado martes 7 de enero y que afecta a todo aquellos residentes al este de la carretera 101, al norte de Mulholland Drive y al sur del bulevar de Hollywood, este desastre representa una auténtica catástrofe natural, al haber arrasado aproximadamente 11.000 hectáreas; humana, al haberse cobrado diez vidas, según el gobernador de California, Gavin Newsom; y económica, al enfrentar unas pérdidas estimadas que podrían alcanzar los 50.000 millones de dólares, según diversos analistas.
Ante esta emergencia nacional, el presidente Joe Biden ha anunciado que el gobierno federal cubrirá los costes totales del desastre durante 180 días. Por su parte, los analistas de JPMorgan han estimado que las pérdidas económicas totales podrían alcanzar los 50.000 millones de dólares (20.000 de dólares de las aseguradoras) y otros como los de AccuWeather, han calculado que los daños podrían oscilar entre 52.000 y 57.000 millones de dólares. En comparación, el incendio Camp de 2018, considerado el más costoso de California hasta ahora, generó 10.000 millones de dólares en pérdidas aseguradas, mientras que los incendios de Maui en 2023 ocasionaron daños de 5.600 millones de dólares.
El primer incendio, localizado en Pacific Palisades, es el más grande de los cinco activos y ha arrasado miles de sus propiedades, cuyo precio medio de una casa supera los 3,5 millones de dólares, muchas de ellas de rostros muy conocidos como: Paris Hilton, Billy Crystal, el entrenador de los Lakers, JJ Redick, Lady Gaga, Jaime Lee Curris, Miley Cyrus, Jennifer Aniston, Orlando Bloom, Guillermo del Toro, Ben Afleck, Bradley Cooper, Tom Hanks, Reese Whiterspoon o el matrimonio de Leighton Meester y Adam Brody. Según Jonathan Porter, meteorólogo jefe de AccuWeather, este incendio, conocido como Palisades Fire, ha consumido más de 6.800 hectáreas, y su vecino, Eaton Fire, ha arrasado unas 4.300 hectáreas. Los otro tres incendios se identifican como Hurst, Lidia y Sunset.
Al menos 150.000 personas han sido evacuadas (y otras 166.000 alertadas) y 9.000 estructuras han resultado destruidas o dañadas. La situación no muestra señales de mejora debido a los fuertes vientos de temporal, que dificultan las labores de asistencia. La magnitud del desastre subraya el impacto creciente de los incendios forestales en California, especialmente en áreas costeras como Santa Mónica y Malibú, donde las propiedades tienen un valor promedio superior a los 2 millones de dólares.
Aunque todavía es muy temprano como para evaluar las implicaciones financieras a largo plazo para los gobiernos locales, los daños en propiedades de alto valor en Pacific Palisades y otras zonas exclusivas de Los Ángeles refuerzan aún más la urgencia de la creación de medidas para reducir estos desastres naturales o al menos conseguir un mayor control sobre ellos.