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Arte y velocidad para la vuelta de BMW a LeMans

La creación celebra la vuelta a LeMans 25 años después de su última participación que acabó con victoria.

Ganar con estilo es la mayor ambición de todo amante de las carreras y de todo aquel que tenga algo que expresar. Y si ya juntas el carácter competitivo de BMW y la cultura con el pedigrí de las icónicas 24 horas de Le Mans te aparece esta obra de arte convertida en la máxima expresión de la tecnología moldeada en coche de carreras.

Es el nuevo ArtCar recién estrenado en primicia Mundial en el Pompidou parisino, centro del arte mundial y a pocos kilómetros del circuito donde se correrán las próximas 24 horas de Le Mans, la carrera más emblemática y carismática del Mundo. La ganó BMW en 1999 por última vez y regresan ahora a la competición con un coche de diseño futurista y cubierto con estos colores que expresan sensación, pasión, historia y emoción.

Es su amplia relación con las vibraciones que provoca una pintura y conducir junto a la belleza de las formas. Sus coches también son arte en movimiento expresado en este Hypercar híbrido con la mayor tecnología de combustión y eléctrica que acabará inspirando a sus modelos de calle. Para esto sirve la competición y para sentir la gloría de un triunfo al que aspiran 25 años después.

Dicen que los coches de LeMans (WEC) son los más bonitos del Mundo y a sus formas futuristas con un morro genuino y agresivo y que ha llamado mucho de atención, le ha servido de lienzo a la artista Julie Mehretu que ha expresado la velocidad y las raíces humanas con trazos sobre este M Hybrid V8 para plasmar lo más primitivo y actual, competir y ganar.

Ella etíope inspirada por los inicios de la humanidad y la pureza africana trasladada a Nueva York a la jungla de la sociedad. Color, líneas negras, urbe, trazos salvajes, colores llamativos. Un crisol de tonos eclécticos representados en esta belleza sobre ruedas dispuesta a mostrarse al Mundo. Puro y real. Expresión desatada entre tanta normalidad. “Fui a ver la carrera a Daytona, y la experiencia fue abrumadora. Diseñadores, ingenieros, aerodinamicistas y muchas otras mentes creativas están trabajando para llevar este vehículo al extremo. Cuando salga ahora al circuito, se cumplirán muchos sueños».

Mehretu pensó en cómo el coche atravesaría el cuadro y cómo se fundiría con la pintura. Esa es su interpretación abstracta plasmada en fotografías alteradas digitalmente, capas de cuadrículas de puntos, colores neón y trazos negros. «La idea era hacer un remix, un mash-up del cuadro. No dejaba de ver que la pintura goteaba dentro del coche. Incluso los riñones del coche inhalaban la pintura».

Es el coche-arte número 20 de BMW, cada uno de ellos con un artista y una edición especial. Antes lo hicieron Andy Warhol, Jenny Holzer, Jeff Koons o el español César Manrique con un BMW 730i colorido en 1990. Hace 25 años que no se reproducía un ArtCar y por eso fue un acto histórico con presencia Mundial en el Museo de vanguardia de referencia. 

LeMans llegará el próximo 15 de junio y serán 24h salvajes con esta máquina futurista de 670cv biturbo con recuperador de energía y de nombre oficial M Hybrid V8 con el que BMW tratará de ganar como lo hizo en 1999, en aquella ocasión con otro coche convertido en arte, y una vez logrado el objetivo retirado de la competición. Vuelve ahora con tres pilotos de reconocido prestigio (Frijns, Rast y Van Der Linde) haciendo la temporada completa en el Mundial de Resistencia

El objetivo es la gloria en la Madre de todas las carreras, pero con su expresión y su mensaje, con la belleza y el poder del arte, parece que ya han transcendido y que de alguna manera ya han ganado antes de empezar la pura competición en sí, que es para lo que estamos diseñados, belleza y gloria.

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