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Eva Cebrián, vicepresidenta del ‘board’ de Latin Grammy: «Hay muchas mujeres en la industria que necesitan apoyo y visibilidad»

El evento más importante de la música latina se celebra hoy en Sevilla. Y una de las personas que ha ayudado a que esto ocurriera ha sido Eva Cebrián (Madrid, 55 años), vicepresidenta del ‘board’ de Latin Grammy y miembro del ‘board’ de la Academia Latina de la Grabación. “Ha sido una iniciativa de Andalucía. Yo, como vicepresidenta y española, he sido el vehículo para poner en contacto a las dos partes, pero el éxito se debe fundamentalmente al interés de la Junta de Andalucía. Ha sido el motor principal y ha puesto todos los recursos necesarios para que esto se llevara a cabo”, puntualiza.   

Desde el reggaeton hasta el flamenco, pasando por la cumbia, el folclore y el rock. Todos los ritmos musicales han sonado estos días en la ciudad andaluza que durante una semana ha organizado multitud de eventos relacionados con la industria del entretenimiento y que celebra esta noche su traca final: la gala de los Latin Grammy en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla, con los artistas más importantes del panorama musical como Shakira, Bizarrap o Rosalía –quizá dos de las actuaciones más esperadas de la noche–. “Es la primera vez en 24 años que este evento se celebra fuera de Estados Unidos. No ha sido sencillo porque no hablamos de un terreno o huso horario cercanos”.  

Eva Cebrián fotografiada en Madrid para Forbes Women. (c) Jaime Partearroyo

Convertirse en miembro del ‘board’ de los Latin Grammy, donde llegó en 2016, ha sido la última etapa de esta mujer que ha crecido laboralmente en la industria musical donde ha tocado todos los palos. Desde la promoción musical en Doctor Music, hasta el lanzamiento de los40.com junto al gurú de Internet recientemente fallecido Mario Tascón, pasando por el fenómeno de Operación Triunfo de la mano de Narcís Rebollo –actual presidente de Universal y, en su día, fundador de Vale Music–, o ejerciendo de manager de David Bisbal cuando el artista vivió su apogeo profesional y lanzó su carrera internacional. 

Para Eva, la música y la radio han formado parte de su vida desde que tiene recuerdo. “En mi comunión me regalaron un comediscos y dos singles, Funkytown y Linda, de Miguel Bosé. Estaba siempre escuchando la radio, me grababa mis propias cintas… La radio musical siempre me ha acompañado”, confiesa sobre dos de sus grandes pasiones. Aunque también ha trabajado en TVE y en el audiovisual y ahora se dedica a producir películas, documentales y programas de televisión con su productora EvaFilms

Eva es, además, hija del periodista y escritor Juan Luis Cebrián, fundador de El País, ex presidente del Grupo Prisa, miembro de la Academia de la Lengua y en su día uno de los hombres más poderosos de España. “Ser hija de Juan Luis Cebrián es una fortaleza y una debilidad. Una cara y una cruz”, asegura mientras recuerda alguno de los momentos históricos que ha vivido a su lado: “Pasé la noche electoral de 1982 en El País. Yo tenía 13 o 14 años. De ahí fuimos al Pirulí porque mi padre intervenía en un programa y luego al Palace, a escuchar la rueda de prensa de Felipe González”. 

Eva y su padre, Juan Luis Cebrián, fotografiados durante un evento en el año 2011.

Hoy, sentada en uno de los salones del hotel Santo Mauro, el lugar donde su padre celebró su ingreso en la Academia de la Lengua, responde a nuestras preguntas durante una lluviosa tarde de otoño

¿Cómo ha sido la negociación para celebrar los Latin Grammy en Sevilla?

Más que negociación ha habido una sintonía muy grande. Ha sido muy complejo para el CEO de nuestra compañía, Manuel Abud, porque es la primera vez que salimos de Estados Unidos. Se ha celebrado en ciudades como Los Angeles, Miami y los últimos 14 años en Las Vegas. Durante muchos años ha habido peticiones de muchos países y ciudades que se han atendido por parte de la Academia.

¿Por qué se eligió Sevilla? 

Primero se decidió Andalucía y luego Sevilla. Para mí el punto de inflexión es que esta comunidad autónoma comparte los principios de la Academia no solo de la gala, sino todo un engranaje cultural, como la fundación Paco de Lucía, que han ayudado a cerrar el acuerdo. Además, es un acuerdo a largo plazo. Tenemos un contrato de tres años con la marca Andalucía y seguiremos haciendo eventos especiales en esa comunidad autónoma. 

¿Qué destacarías de este evento musical?

Los Latin Grammy van mucho más allá de la gala de esta noche. Durante una semana ha habido multitud de eventos destinados a la industria del entretenimiento. Por ejemplo, se ha celebrado la séptima edición de Leading Ladies of Entertainment, uno de mis eventos favoritos. Tiene como fin apoyar a mujeres en la industria musical como productoras, artistas, representantes, técnicas, escenógrafas, coreógrafas… Hay mucho trabajo más allá de la figura del artista.

¿En qué consiste tu labor en el ‘board’ de los Latin Grammy?

En el board hay perfiles muy variados, músicos, autores, artistas… Gente que puede aportar algo a la industria en el sentido más amplio. Yo aporté el poner en comunicación con Andalucía. Hubo mucha colaboración por parte de Andalucía y nuestro socio principal que es Univisión. La labor del board es apoyar y engrandecer el trabajo de la Academia. 

Junto a los miembros del grupo Red Hot Chili Peppers, en WiZink Center de Madrid, en 2017.

La música latina está de moda. ¿Se podría decir que ha desbancado al rock?

Ha adquirido mucha notoriedad. En el top mundial están Karol G, Bad Bunny, Shakira, Rosalía, Peso Pluma, Eslabón Armado, Bizarrap… Pero creo que es muy importante separar Latin Grammy del movimiento urbano y el reggaeton. La música latina en todas sus expresiones es un fenómeno global mundial, con grandes estrellas. Pero los Latin Grammy van mucho más allá. Hay bandas sonoras, música cristiana en portgués, folklore, tropical… La gente acostumbra a que el género latino ya es un tipo de música. Es como cuando en la FNAC ponía ‘cine español’, como si fuera un género. Yo quiero saber si es un thriller, una comedia romántica…

Este año el premio ‘Person of the year’ es para Laura Pausini por sus 30 años de carrera. Con ella han sido solo tres las mujeres homenajeadas con este premio. 

Shakira fue ‘Person of the year’ con 34 años, la más joven de la historia, y por desgracia se nos murió Celia Cruz y no llegamos a premiarla. Pero que en 24 años solo haya habido tres mujeres te da un dato de cómo ha sido esta industria. Por eso un programa como el de Leading ladies of entertainment es fundamental. Las mujeres necesitamos otras mujeres que nos inspiren. Está muy bien que te inspiren artistas como Rosalía o Shakira, pero llegar tan arriba es muy difícil y requiere mucho esfuerzo. Más allá de las grandes estrellas, tan importantes para la nueva generación de artistas, hay otras mujeres en el gremio: ingenieras de sonido, managers, periodistas musicales, representantes, agencias de comunicación y relaciones públicas… Figuras de la industria como Rebeca León, que fue manager de Rosalía, Juanes, o Mia Nygren, directora de Spotify para América Latina.

Está muy bien que te inspiren artistas como Rosalía o Shakira, pero llegar tan arriba es muy difícil y requiere mucho esfuerzo. Más allá de las grandes estrellas, tan importantes para la nueva generación de artistas, hay otras mujeres en la industria del entretenimiento que también necesitan visibilidad

¿También hay mucha desigualdad en esta industria?

Hay muchas mujeres en la industria de la música que no son Rosalía. Gente que está detrás, no solo en la música, sino en el entretenimiento, que necesitan apoyo y visibilidad. Si para una mujer que tiene un trabajo convencional es difícil conciliar, imagínate para las que trabajan en esta industria. Coreógrafas, técnicas de sonido, managers o agentes de prensa que tienen que conciliar mientras están de gira.

Tú misma te has divorciado y tienes dos hijos. ¿Cómo has hecho para conciliar?

Hay una foto con Mario Tascón durante el lanzamiento de los40.com en la que no se ve a mi hijo Joan, que estaba dos mesas más atrás. Yo vivía sola con él porque con 30 años me quedé viuda cuando mi pareja, el músico catalán Marc Grau, sufrió un cáncer fulminante. En el lanzamiento de los40.com Joan tenía unos siete años. Todo sucedía de noche así que se vino conmigo a la redacción. 

¿Cuál ha sido uno de tus momentos favoritos de los Latin Grammy? 

Muchos. Me encantó cuando en 2017 nombraron a Alejandro Sanz ‘Person of the year’. Con ese premio se celebra un concierto en honor al homenajeado en el que salen artistas a cantar sus temas durante una cena de gala con unas dos mil personas con lo más granado de la industria. Rosalía cantó ‘Cuando nadie me ve’ y nos dejó a todos alucinados por su carisma, por su forma de cantar… Yo creo que su carrera empezó en ese instante. 

Empezaste tu carrera como promotora de conciertos en Doctor Music y estuviste de gira con Tina Turner. ¿Cómo fue esa experiencia?

En 1990 el alcalde de Gijón, un melómano que se llamaba Tini Areces, llevó a Tina Turner a actuar al estadio de la ciudad, El Molinón. Luego de Asturias volamos en su avión privado hasta Barcelona, donde tocaba al día siguiente en el Estadio Olímpico. Yo solo tenía 22 años. Me impresionó muchísimo la calidad de los músicos que llevaba y la forma física de ella y sus bailarinas. Las estrellas son como deportistas de élite.

Junto a Mario Tascón estuviste en el lanzamiento de los40.com. ¿Cómo lo recuerdas? 

Recuerdo cuando vino a verme Mario Tascón, el mejor jefe que he tenido. Le dije: ‘Yo soy usuaria, no sé nada de tecnología’. Y él me contestó: ‘Te voy a explicar cuatro puntos básicos para que los digas cuando estés con un programador’. Si querías hacer algo de comunicación en internet necesitabas tener programadores que hicieran lo que tú querías. Era importante que esos dos mundos se hablaran. Yo siempre he estado en la parte creativa. Hay una foto mía con Mario el día que lanzamos los40.com. Fue un lanzamiento muy importante. Entonces pensé que iba a desaparecer todo y solo quedaría internet. Y lo sigo pensando.

Eva Cebrián con Mario Tascón durante el lanzamiento de los40.com, a principios de los años 2000.

¿Cómo has vivido el cambio de la industria de la música con la irrupción de Internet?

Cuando yo trabajaba en Prisacom Mario me dijo, allá por el año 2000: ‘Habrá un momento en que entremos en un bar y el móvil reconocerá la canción que estamos escuchando’. Y yo le decía: ‘¡Pero qué dices!’. Ahora yo no sé vivir sin Shazam. Soy una heavy user de las plataformas de música. La gran revolución musical vino por parte de las tecnológicas. Apple fue quien hizo el iPod. La industria de la música ha estado en contra de la tecnología porque cuando apareció era para convertirse en pirata con Napster, etc… Hasta que Spotify creó un modelo de suscripción y un negocio rentable para las compañías discográficas. Alrededor del 75% de sus ingresos vienen por ahí. La copia física ya casi no existe. Desde los tiempos de prisacom he sido fan de la tecnología al servicio de hacernos mejores. Ahora, ¿hay muertos por el camino? Pues sí.

Luego trabajaste con Narcís Rebollo en pleno boom de Operación Triunfo. 

Cuando lanzaron el primer OT me invitaron a ser jurado en el programa, iba un lunes sí, otro no. Era un momento televisivo muy potente. ¡Hace 22 años! Luego Narcís me propuso dirigir la Academia de Operación Triunfo. Empezamos a hacer bolos, licencias, camisetas, panini, cromos… Una locura. Hacíamos las giras conjuntas de OT1 y OT2 y luego pasé a quedarme con Bisbal. 

¿Por qué te quedaste como manager de David Bisbal? 

Era el que más trabajo me daba y en el que más crecía con Manuel Carrasco. Pero bueno, en OT1 vendían todos como bestias. El más pequeño vendió medio millón de copias. Era una barbaridad. Una máquina de hacer dinero. Era material sensible. Y Bisbal tiene una disciplina espectacular como artista y una voz inigualable. Es muy trabajador, muy constante. Monté una empresa para llevarle sobre todo su carrera internacional. Fue realmente un momento muy bonito y muy bueno de ver cómo funcionaba el lanzamiento como, creció en Latinoamérica… En los Grammy le dieron el premio de Best New Artist. Eran chicos muy jóvenes que les pasaban cosas muy bestias.

Con su buen amigo Alejandro Sanz, fotografiados en la sede de la radio de Los 40 en 2017.

Has conocido a todo tipo de personalidades. ¿Quién te ha impactado más? 

Los Rolling. Aunque no soy nada mitómana. Cuando tenía 22 años y trabajaba en Doctor Music me mandaron a buscar a un artista británico al aeropuerto. Cuando me vio con mi R5 se quedó flipado. Fue un mal educado horroroso. Y luego en unos Premios Ondas me crucé con otro maleducado. Desde entonces aprendí que de los artistas me importa su arte. Aunque me impacta más cuando conoces a un artistas a nivel personal. Lo único que me hubiera gustado es percibir que los artistas fueran más felices. Me da pena porque no he conocido a ninguno feliz del todo. 

Un dolor que les sirve para crear, como ha demostrado Shakira con sus últimos éxitos, a pesar de las críticas por involucrar a sus hijos o mostrar sus sentimientos.

Las mujeres tienen que empatizar con el dolor de otras mujeres. Generalmente nos han jodido, pero tienes que quedar como una señora. Callada cuando te zurran, callada cuando te ponen los cuernos, callada cuando estás enfadada… Te lo guardas y luego pasas 20 años en terapia por haberte callado las cosas que te ha hecho un jefe, un padre, un novio o un marido. Lo que ha hecho Shakira es ponerle voz al dolor de muchas mujeres. Hemos aguantado tanto las mujeres, especialmente las mujeres artistas, actrices, presentadoras de TV, modelos, cantantes, compositoras… Un poquito de respeto. 

Con mi productora, EvaFilms, estoy especializada en hacer películas sobre libros que han escrito mujeres. Mi próximo proyecto es ‘También esto pasará’, de Milena Busquets

¿Cómo ha sido tu incursión en el cine a través de tu productora EvaFilms?

Estoy especializada en hacer películas sobre libros que han escrito mujeres. He acabado La ternura y mi próximo proyecto es También esto pasará, el primer libro de Milena Busquets. Empezamos a rodar con María Ripoll en abril. Y estoy preparando una peli sobre la chef María Marte, dominicana que empezó fregando platos y terminó con dos estrellas Michelin. Cada vez me interesa más trabajar con mujeres y con cosas que han escrito mujeres. Las mujeres directoras tienen menos oportunidades y y tienen menos películas de mujeres en las que inspirarse. 

¿Hay mucha diferencia entre producir una película dirigida por una mujer o por un hombre?

Cuando salgo a levantar financiación siempre me cuesta más con una mujer. Me gustaría que hubiera más papeles y más oportunidades para directoras de fotografía, guionistas, compositoras y actrices, por supuesto. El año pasado entre las nominadas para los Goya había cuatro películas dirigidas por mujeres. Esto es fruto del trabajo de mucho tiempo y a mí me interesa mucho sobre todo porque son historias con las que conecto. Me gusta la manera que tienen de contar las cosas. 

Eva con su madre, Gemma Torallas, en El Escorial, año 1970.

Eres hija de padres divorciados, algo raro en tu época. ¿Cómo lo recuerdas?

Con vergüenza. Yo tenía 10 años y era la única de mi clase. [Su madre es Gemma Torallas, funcionaria hoy jubilada]. En los Goya del año pasado uno de los hijos de Carlos Saura habló de la importancia de las mujeres de su padre [Carlos Saura tuvo cuatro mujeres, como Juan Luis Cebrián]. Para mí alguna de las mujeres que ha tenido mi padre han formado parte de mi vida. Sobre todo mi primera madrastra, Inmaculada González de Lara, Chamaca. Estuvieron diez años juntos y fue muy importante para mí. 

Tu padre ha levantado filias y fobias. ¿Cómo lo has vivido?

Ser hija de Juan Luis Cebrián es una fortaleza y una debilidad. Una cara y una cruz. En mi infancia, durante la transición, fue duro. Teníamos una lechera en la puerta de casa que yo pensaba que estaba para protegernos. A su lado he vivido momentos históricos como el 23 F o el bombardeo de Trípoli. Luego en mi vida profesional, mi padre ha levantado pasiones y muchos odios. Él y yo no somos la misma persona aunque mucha gente me juzga como si lo fuera.

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