El posible regreso de Lionel Messi al FC Barcelona este verano se ha «complicado» por la explosiva bronca de su hermano Matías y su amenaza de echar al presidente Joan Laporta del club, según un informe.
El mejor jugador catalán de la historia se marchó llorando en 2021 después de que Laporta no consiguiera sortear el estricto límite salarial de la Liga y ofrecerle un nuevo contrato.
Messi fichó rápidamente por el París Saint Germain. Pero su acuerdo de dos años expira en el Parque de los Príncipes el 30 de junio, y la incertidumbre rodea el futuro del siete veces ganador del Balón de Oro.
Se ha informado de que podría renovar con el PSG o fichar por el Inter de Miami de la MLS, mientras que el gigante saudí Al-Hilal habría preparado una cuantiosa oferta de 350 millones de dólares anuales que, de ser aceptada, le permitiría encabezar la lista Forbes de futbolistas con mayores ingresos del mundo.
Dado que el futbolista de 35 años podría convertirse pronto en agente libre, también se ha hablado de un posible regreso al FC Barcelona.
Sin embargo, teniendo en cuenta los comentarios explosivos realizados por el hermano del jugador, Matías, en Twitch esta semana, donde se jactaba de que el campamento de Messi «echaría» a Laporta del club si volvían, SPORT dice que esta potencial operación es ahora «complicada».
Se dice que Laporta ha dicho a amigos cercanos que su «sueño» es ganar la Liga y atraer a Messi de vuelta al Camp Nou.
Aunque el técnico Xavi Hernández le está ayudando a conseguirlo a medias, con el Barça actualmente ocho puntos por encima del Real Madrid en el liderato de la Liga, «episodios como el de ayer hacen imposible» que Messi vuelva a vestirse de blaugrana.
Al parecer, las palabras de Matías Messi fueron mal recibidas en el club y parece que «la herida puede tardar en cicatrizar».
Entre otras cosas, Matías también dijo que los españoles son «traidores», y criticó a los aficionados del Barça por no manifestarse en las calles para pedir la cabeza de Laporta cuando Messi se marchó.
Sugirió que el club no tiene historia sin su emblemático número «10» y que su museo es en cambio un santuario a la figura que se unió a ellos como un tímido niño de 13 años en el año 2000.
El entorno de Messi se ha distanciado de las palabras de Matías, que también ha pedido disculpas.
Lo que hace que el regreso de Messi sea más complicado que cualquier otra cosa son las mismas restricciones financieras que frenan al Barça.
En pocas palabras, deben recortar 200 millones de euros (215 millones de dólares) de la masa salarial de cara a 2023/2024, y sería necesario un éxodo masivo de jugadores sólo para conseguir a un Messi de 36 años, lo que podría no sentar bien a Xavi.