‘El País más rico del mundo’ es la campaña con la que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación pone en valor la calidad y variedad de los productos agrarios, ganaderos y pesqueros producidos en España, además de reconocer el trabajo de los agricultores, ganaderos y pescadores que representan el origen de nuestros alimentos.

Las nuevas generaciones de hombres y mujeres conforman el sector agroalimentario y pesquero con el fin de poner en valor la diversidad del territorio español y la calidad e infinita variedad de los productos que se pueden obtener de él.

No obstante, es una realidad que falta un relevo generacional –el Ministerio señala que sólo el 4% de los autónomos del campo es menor de 34 años y el 15% tiene menos de 45 años–, además de comprensión por parte del consumidor y prácticas sostenibles que beneficien el estado de los cultivos y la salud de quién consume los productos.

En este sentido, el principal objetivo de ‘El País más rico del mundo’ es concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de consumir productos de temporada y reducir el desperdicio alimentario, así como invitar a consultar el etiquetado de los alimentos para conocer sus características y su procedencia.

La Estrategia Alimentos de España que está desarrollando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, persigue apoyar la promoción de nuestros alimentos, tanto en el mercado exterior como en el nacional, buscando sinergias entre alimentación y otros sectores estratégicos de nuestro país como la cultura, la gastronomía o el deporte.

‘Talento Joven de la Gastronomía’

España es una potencia alimentaria donde se producen infinidad de cultivos gracias a las diferentes climatologías características del país. Además, es una región con una destacada historia gastronómica y muy diferente entre localidades, lo que permite una gran diversidad, calidad y creatividad culinaria.

Hoy por hoy se está empezando a apostar por la profesionalización del sector agrario para incentivar el emprendimiento y el incremento de prácticas honestas y sostenibles. Tanto es así que, de la mano del Basque Culinary Center, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha puesto en marcha ‘Talento Joven de la Gastronomía’, una iniciativa que busca reconocer a jóvenes profesionales del sector, cuya actividad está marcando la diferencia dentro de la cadena de valor de la gastronomía. Una nueva generación que destaca por sus iniciativas emprendedoras, por haber innovado en sus respectivos campos o porque ha logrado despuntar en su carrera con proyectos relevantes.

Es indispensable valorar a quienes son responsables de llevar la comida a nuestras mesas y qué mejor manera que conocer sus pensamientos, opiniones y experiencias.

Es el caso del joven viticultor José Gil, que, junto a Vicky Fernández, su compañera de vida y del campo, elabora vinos en Bodegas Olmaza, el negocio familiar que dirige desde 2012 y supone la tercera generación al frente.

También se pone en valor Moncalvillo Meadery –dedicado a la apicultura y productos derivados– de Ismael Echapresto; el Proyecto los Aires, que apuesta por la agricultura ecológica y está dirigido por Laura García Jiménez; Cultivo Desterrado, en el que Rafael Monge ve la agricultura desde un punto de vista de diseño; y la Sidrería Isastegi, guiada por Joseba y Mikel Lasa.

Jóvenes, animales y medio ambiente

En el ámbito ganadero de España se ha puesto en evidencia la importancia de un relevo generacional para que las siguientes generaciones continúen con el legado heredado por sus familias. El objetivo es que la juventud ofrezca una visión que combine su herencia con ideas innovadoras que tengan un impacto positivo en los animales y el medio ambiente. 

Las nuevas generaciones de hombres y mujeres que lideran el sector ganadero en España buscan generar estrategias y nuevas metodologías para poner en valor sus productos y así transmitir los beneficios de su consumo al público.

Es el caso de Ricardo Gómez Rodríguez y Quesería Airas Moniz, proyecto a través del cual demuestra que mediante sus pasiones –los animales, el queso y el mundo rural– se le puede dar un giro a la metodología tradicional de producción.

Asimismo, emprendedores como los de quesería Los Tiemblos, entre ellos María Jesús Fernández Ruiz, han apostado, en los últimos años, por metodologías más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente; y Quesos y Besos, de Silvia Peláez Navero, se centra en rescatar una tradición ganadera: producir y vender leche de cabra y elaborar con este rico alimento sus quesos, mientras que Elena y Ana Soberón se encargan de Quesería Soberón para elaborar queso cabrales. Rafael Gonzales es ganadero desde los 16 años y dueño de la ganadería que lleva su mismo nombre.

Respeto por el ecosistema marino

El patrimonio gastronómico local es un tesoro invaluable que apuesta por la innovación y la creatividad, así como la sostenibilidad y el respeto por el ecosistema marino.

Los pecadores simbolizan el origen de nuestros productos, así como los agricultores y los ganaderos: Porto-Muiños es un proyecto centrado en las algas que nace de la curiosidad de Rosa Mirás y Antonio Muiños; Venta de ortigas de mar frescas de José Pérez Fernández es otro de los diferentes y pioneros proyectos basados en el mar; Mariscos Comesaña –nacida en 1989– es una comercializadora de pescado y marisco que ya tiene su propia tienda online y cuenta con Águeda Comesaña; y Mónica y Pilar regentan la empresa familiar que lleva su apellido, Loureda Pescados, fundada en 1975.