No hará falta esperar a que se abra el sobre con el nombre de los premiados: pase lo que pase esta noche, los Goya de 2021 son ya históricos. Se celebrarán hibridando lo telemático y lo presencial, «una ceremonia obligadamente distinta y extremadamente responsable», según la Academia de Cine. Los 166 nominados conectarán en directo con el teatro Soho de Málaga, que gestiona el actor Antonio Banderas, quien presentará la la gala junto a la periodista María Casado.
No habrá la tradicional alfombra roja, pero sí grandes nombres del cine español, como Pedro Almodóvar, Penélope Cruz, Juan Antonio Bayona o Emma Suárez, que subirán al escenario malagueño a anunciar los vencedores de la noche. Robert De Niro, Al Pacino, Charlize Theron o Laura Dern les acompañarán virtualmente, enviando mensajes mensajes de apoyo a la industria cinematográfica española en su fiesta más atípica.
Y es que si algo define a estos Goya 2021 es lo insólito, en todos los ámbitos. El plan inicial era conmemorar el nacimiento del cineasta Luis García Berlanga celebrando los premios en Valencia, y la ciudad presupuestó la ceremonia en 2 millones de euros. Pero llegó la pandemia y cambiaron los planes. Tras un año marcado por el cierre de salas y el retraso en el estreno de las grandes producciones, la Academia también se ha visto obligada a relajar los criterios para que las películas estrenadas directamente en streaming pudieran concurrir a los premios, de forma excepcional.
Una excepcionalidad que ha tenido una feliz consecuencia: es la primera vez en la historia que cuatro de cada diez nominados son mujeres, que alcanzan el el 41% de las candidaturas. Un salto cuantitativo evidente, dado que el pasado año la presencia femenina apenas llegaba al 21% y el anterior, al 20%, según el informe realizado por la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA). Los datos arrojan muchas primeras veces. Es la primera ocasión que el premio a mejor director se disputará en paridad: Isabel Coixet por Nieva en Benidorm e Iciar Bollaín por La boda de Rosa, compiten con Juanma Bajo Ulloa por Baby y Salvador Calvo por Adú. Otra mujer, Daniela Cajías, podría hacer historia y llevarse el Goya a mejor dirección de fotografía, galardón históricamente masculino.
La pandemia avanzó hacia la paridad
¿Qué ha llevado a que la presencia femenina, delante y detrás de las cámaras, se haya incrementado tanto en esta edición? Por un lado, los largometrajes producidos por mujeres han aumentado gracias al aumento de ayudas al cine hecho por ellas, que ha pasado de los 11 millones de euros a los 20. «Hemos garantizado que al menos el 35% de la dotación se destine a proyectos dirigidos por mujeres con especial apoyo a las directoras noveles. En largometrajes hemos llegado al 38%», detalló el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, el pasado febrero.
Pero no es solo eso. Como explica Cristina Andreu, directora y presidenta de CIMA, el aumento de la representación femenina es un reflejo de cómo ha impactado la pandemia a la industria. «Se han estrenado muy pocas películas y normalmente las películas de bajo presupuesto son las que hacen las mujeres», explica. Además, han llegado a la cartelera más documentales que nunca, un género con mayores porcentajes e mujeres en los cargos de liderazgo. Que los directores que tradicionalmente cuentan con más presupuesto (Amenábar, Almodóvar o José Antonio Bayona) no hayan rodado en el último año también ha facilitado que las directoras accedan a parte del pastel presupuestario.
La película Las niñas, la ópera prima de Pilar Palomero, es un reflejo de estos cambios en el sector. La cinta cuenta con nueve nominaciones, en categorías (película, dirección novel, guion…) en las que las que las mujeres suelen tener una escasísima representación. «Ya no solo compiten en profesiones donde están sobrerrepresentadas al estar vinculadas con los roles tradicionales de género: diseño de vestuario (83%) y maquillaje y peluquería (75%); ahora también son jefas de equipo y optan a galardones», apuntan desde CIMA.
Si este avance es solo coyuntural, un espejismo paritario provocado por la pandemia; o un avance estructural irreversible en el audiovisual español, está por ver. De momento, los Goya 2021 además de entregarse en la antesala del Día de la Mujer, estarán dominados por ellas, se lleve quien se lleve las estatuillas.