La operación forma parte de la estrategia que Grupo Albia ya había comenzado a desarrollar con la gestión de los cementerios de Parla (Madrid) e Illescas (Toledo), para ofrecer a las familias un servicio integral de calidad, incorporando la gestión de cementerios como una línea de actividad clave dentro de su oferta de servicios.
Tras la integración de Procenesa -que gestiona los cementerios de Alcobendas, Casarrubios del Monte, Sevilla la Nueva, Griñón, Olías del Rey, Torrejón de Ardoz, Villalbilla y El Álamo-, Grupo Albia prevé transformar estos entornos y «alejarlos del concepto tradicional de camposanto, incorporando nuevas sensibilidades, ritos y formas de homenaje».
El director general de Grupo Albia, Daniel Palacios, ha destacado la gestión de cementerios como «un elemento estructural del servicio funerario», tanto por la relevancia económica de ciertas actividades como por la oportunidad de crear «espacios más modernos, sostenibles y adaptados a las necesidades actuales de las familias».