La transacción se ha cerrado por un importe inicial de 27,6 millones de euros, al que se suma un pago aplazado de hasta 8,4 millones de euros condicionado al desempeño financiero de OKC en 2026, hasta un máximo de 36 millones.
BDO Abogados ha prestado servicios de ‘due diligence’ fiscal, legal y laboral, análisis de competencia y asesoramiento legal en la transacción, en coordinación con BDO Deal Advisory, responsable de la ‘due diligence’ financiera y la valoración inmobiliaria.
La operación ha sido liderada por Álvaro Marco Asencio, socio responsable del departamento mercantil de BDO Abogados, y Andrés Álvarez-Sala Turiel, director del mismo departamento.
Marco ha subrayado el carácter integral del asesoramiento y la complejidad transfronteriza de la transacción, mientras que Álvarez-Sala ha destacado el enfoque multidisciplinar y la capacidad de la firma para gestionar operaciones internacionales de gran envergadura.
