Satlink es una empresa tecnológica española que nació hace más de 30 años dedicada a las telecomunicaciones por satélite, especialmente en zonas con cobertura limitada, como el sector marítimo. Con el paso del tiempo, su fuerte relación con la pesca de altura la llevó a desarrollar herramientas que hicieran esta actividad más eficiente, selectiva y transparente. Esa experiencia marcó la base de su evolución hacia un modelo donde la sostenibilidad y el conocimiento de los océanos han pasado a ser el eje central de su actividad.
Para avanzar en este camino, la compañía ha recurrido a la adquisición de empresas especializadas en tecnología marina. Gracias a ello, hoy dispone de sistemas de recogida de datos oceánicos, soluciones de monitorización y herramientas capaces de rastrear incluso basura en el mar. Uno de los movimientos más importantes ha sido la compra de la firma francesa Nke, referente internacional en instrumentación científica para medir parámetros del océano. Esta adquisición le permite ofrecer soluciones completas que combinan sensores de alta precisión con plataformas digitales de análisis.
Además, Satlink mantiene su papel como pionera en conexión vía satelite en alta mar y continúa siendo proveedor clave para la Guardia Civil del Mar, la Armada Española y la marina mercante. También reforzó su capacidad técnica con la compra de la canadiense Xeos Technologies, especializada en dispositivos preparados para operar en condiciones extremas.
La compañía ha decidido apostar de forma decidida por un modelo más sostenible debido a dos factores principales:
Por un lado, la creciente demanda de herramientas tecnológicas que permitan una pesca más responsable y una mayor observación del océano. Y por otro, su creciente participación en proyectos científicos internacionales, como el programa Argo, en el que colabora a través de Nke. Este proyecto usa flotadores que recogen datos de temperatura y salinidad a lo largo de miles de metros de profundidad, generando hasta 100.000 perfiles al año que nutren modelos climáticos y oceánicos.
Asimismo, Satlink trabaja en iniciativas medioambientales como Upcycling the Oceans, donde su tecnología ha sido clave para recuperar más de 200 toneladas de basura en el Mediterráneo, y en proyectos de monitorización costera como el que desarrolla en Canet de Berenguer, enfocado en vigilar sedimentos y prevenir la erosión.
El nuevo rumbo de Satlink tiene como objetivo consolidarse como referente global en tecnología para estudiar y proteger el océano. Según el diario Expansión, su presidente, prevé alcanzar los 100 millones de euros de facturación este año, de los cuales el 85% procederá del mercado internacional. Además, ya un 35% de su negocio está directamente vinculado a la ciencia y a la observación del océano, cifra que seguirá creciendo.
La compañía continuará desarrollando equipos para la recogida directa de datos, como boyas multiparamétricas, sensores de calidad del agua, sondas y perfiladores y sistemas de monitorización en tiempo real que incluyen sensores para rastrear corrientes y residuos marinos.
Todo ello se integra en su plataforma digital Ocean Insights, que analiza la información recopilada para ayudar a tomar decisiones informadas tanto en el sector público como privado. En esta nueva fase, Satlink combinará su experiencia tecnológica con un compromiso firme por conocer mejor los océanos y contribuir a su protección.
