Bankia ha logrado este resultado tras descontar la tasa fiscal (391 millones), los intereses minoritarios, y el efecto de la provisión por los litigios de la OPS, que supone un impacto neto en resultados de 184 millones de euros.
Con este avance en los resultados, el consejo de administración de Bankia ha acordado proponer a la próxima junta general de accionistas del banco el abono de un dividendo de 2,625 céntimos de euro por acción con cargo a las ganancias de 2015, lo que representa un 50% más sobre los 1,75 céntimos repartidos con cargo al beneficio de 2014. El ‘pay out’se eleva a casi el 30%.
En términos absolutos, Bankia retornará a sus accionistas 302 millones de euros. De esta cifra, el Estado, a través de BFA, recuperará -tomando como referencia su participación actual en Bankia del 64,2%- otros 194 millones de euros de ayudas públicas, lo que elevará el montante ya devuelto por Bankia a 1.626 millones de euros.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado que Bankia ha sido capaz de cumplir los objetivos comprometidos. “Somos un banco muy sólido, muy solvente y muy rentable. Y estas fortalezas son las que nos permiten proponer un incremento del dividendo del 50%, en definitiva, seguir avanzando en la devolución de las ayudas a los contribuyentes”, ha resaltado.