BrandVoice

El homenaje de Iberia a su avión más legendario que puedes llevar en el bolsillo

Iberia Cards ha construido durante dos décadas un puente entre la historia del viaje y la evolución de los pagos. Lo que nació como una colaboración pionera con Iberia se convirtió en un modelo que une tecnología, emoción y recurrencia. Y esa filosofía también se traslada a los objetos que la representan: las tarjetas. Entre ellas, ninguna encarna tanto legado como Zenit.

Es una tarjeta que no se solicita, sino que se concede, y cuyo valor no nace únicamente de sus beneficios, sino de la historia que carga. “Iberia Cards nos permite extender la relación con el cliente más allá del vuelo”, explica Víctor Moneo. Y Zenit, precisamente, simboliza ese vínculo prolongado en el tiempo.

El diseño de esta tarjeta parte de un hito aeronáutico: un avión histórico de Iberia que, en 1927, estableció un récord mundial de 14 horas y 23 minutos en vuelo continuo. Ese gesto pionero se convierte hoy en el corazón visual de la tarjeta. La ilustración es la representación de un espíritu que rompió fronteras y que ahora se traduce en una forma de viajar sin límites.

Cada trazo de la tarjeta tiene un propósito. El tono champagne satinado habla de una elegancia contenida, heredada de la tradición aeronáutica que hizo grande a Iberia. En palabras de Cobo, “no buscamos lanzar tarjetas, sino construir plataformas de valor”, y Zenit es la prueba física de esa visión: un objeto donde diseño e identidad se funden.

La historia de la tarjeta también está en su ritual. El cajetín personalizado, la carta individualizada, la presentación cuidada… todo recuerda a los antiguos certificados de vuelo que acompañaban a los pioneros. No es una bienvenida: es una investidura. Zenit confirma que el viajero entra en un club donde el legado de Iberia se entrega como símbolo.

Ese legado se actualiza en su versión digital, donde la tarjeta mantiene la narrativa visual sin perder profundidad. Fondos metálicos, gradientes precisos, la silueta del avión reinterpretada… Zenit demuestra que la historia también puede migrar a nuevos formatos sin perder esencia. “La convergencia entre seguridad, tecnología y personalización está cambiando las reglas del juego”, recuerda Cobo. Y Zenit es buena prueba de ello.

Como objeto, Zenit une tres tiempos: el pasado que inspira, el presente que la sostiene y el futuro que anticipa. Y esa coherencia es también parte de la estrategia de Iberia Cards: crear una tarjeta que no solo acumule Avios, sino sentido. Una tarjeta que forme parte de la identidad del viajero, igual que el avión original formó parte de la identidad de Iberia.

Por eso Zenit se convierte en el símbolo de un viaje que empezó hace casi un siglo con un avión que se atrevió a volar más lejos que nadie. Hoy, ese espíritu sigue vivo en cada cliente que la sostiene. Porque Zenit, como su legado, está hecha para quienes continúan con una historia: la suya.

Artículos relacionados