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Perder el miedo

El empresario y promotor inmobiliario Bruno Da Silva analiza los principales desafíos del mercado español y defiende un nuevo modelo de inversión, que rompe con las fórmulas tradicionales.

Bruna Da Silva fotografiado en Madrid el pasado 22 de octubre. Foto: Alfredo Arias.

“El éxito no se trata solo de llegar lejos, sino de mantener viva la pasión que te llevó a empezar”. Bruno Da Silva es un empresario y promotor inmobiliario francés, afincado entre Mallorca y República Dominicana, donde ha desarrollado una intensa actividad en los sectores de la construcción, la hostelería y la inversión inmobiliaria internacional. Su historia es la de un emprendedor que llegó a España “con una maleta y poco más” y que, a base de constancia, visión y valentía, ha convertido la adversidad en impulso. Con BDS Capital promueve un modelo de inversión accesible que ofrece a jóvenes y familias la posibilidad de acceder a la vivienda y obtener rentabilidad, sin depender del sistema hipotecario tradicional. “Quiero ayudar a los emprendedores a recuperar la ilusión y guiarles al triunfo”. Para Da Silva, sus pilares son su pareja Tracey y su hija Angelina.

Tras una carrera marcada por la superación personal, ¿cómo influye su experiencia vital en la forma en que dirige sus proyectos?

Combino acción, valentía e intuición. Liderar, para mí, significa atreverse, tomar decisiones con convicción y convertir los retos en oportunidades de aprendizaje. A lo largo de mi trayectoria internacional he desacubierto que el éxito no consiste en evitar los fracasos, sino en aprender de ellos. Trabajar en distintos entornos y culturas me ha enseñado a valorar la diversidad, la adaptabilidad y la creatividad. En cada proyecto trato de transmitir esa mentalidad: avanzar con determinación, confiar en la intuición y en el talento del equipo, y mantener siempre la motivación por innovar y superar límites.

¿Cuál ha sido el mayor riesgo que ha asumido?

Emprender siempre implica sacrificios, y mi mayor riesgo no ha sido solo financiero, sino también personal. He tenido que renunciar a parte de mi vida social y a ciertas relaciones para poder enfocarme en mi crecimiento. Para construir algo sólido, aprendí a priorizar el tiempo, la energía y las personas con las que me rodeo. A veces, el mayor acto de valentía es elegir un camino que pocos entienden.

Antes de tomar cada decisión, evalúo su impacto a largo plazo, no solo en los resultados económicos, sino también en cómo me acerca a mis objetivos personales y profesionales.

¿Cuáles son las tendencias actuales del sector de la vivienda y la inversión en nuestro país?

El sector inmobiliario está cambiando, pero en España aún hay reformas esenciales que no pueden esperar: liberar suelo para construir, agilizar la burocracia y limitar las licencias turísticas. Facilitar la construcción y simplificar los trámites ayudaría a reducir los precios de la vivienda, frenar la especulación y generar más empleo, con un impacto positivo en la economía. Las licencias turísticas deberían controlarse, porque afectan el acceso de los residentes a una vivienda digna, mientras la demanda turística puede ser absorbida por la oferta hotelera existente. Un modelo de construcción responsable y eficiente beneficia a todos.

¿Cómo se diferencia el sistema de BDS Capital frente a las fórmulas tradicionales?

Ofrecemos un modelo de inversión inmobiliaria que combina alta rentabilidad con recuperación estimada en solo siete años, algo poco común en el sector. Nuestra ventaja principal es apostar por mercados con gran potencial de crecimiento, como República Dominicana, un país referente en turismo, con fiscalidad baja, viviendas accesibles, clima privilegiado y una temporada turística de más de diez meses. Esto genera una demanda constante de alquiler y una revalorización sostenida de los activos, lo que permite ofrecer retornos atractivos y estables. Medimos el éxito no solo por la rentabilidad, sino también por la confianza y satisfacción de nuestros inversores, que ven en este modelo una oportunidad sólida para hacer crecer su patrimonio en un entorno seguro y con proyección internacional.

ómo cree que la educación financiera puede cambiar la manera en que las nuevas generaciones acceden a la vivienda y a la inversión?

La puede transformar por completo. Desde mis redes intento transmitir que no hace falta una gran inversión para empezar a generar ingresos. Durante años se nos ha enseñado a trabajar por dinero, pero no a hacer que el dinero trabaje por nosotros. Mi objetivo es cambiar esa mentalidad, mostrando de forma sencilla y accesible cómo dar los primeros pasos hacia la libertad financiera. Si los jóvenes comprenden pronto cómo funciona el dinero, aprenderán a invertir con cabeza, planificar su futuro y depender menos de un sistema que no siempre juega a su favor.

Ha desarrollado proyectos en República Dominicana y Mallorca. ¿Qué será lo siguiente

Actualmente tengo el foco en Latinoamérica, una región con un enorme potencial de crecimiento y oportunidades para el sector inmobiliario. A medio plazo, nuestro gran objetivo es convertirnos en el principal promotor del Caribe, liderando proyectos que integren inversión, desarrollo sostenible y calidad de vida. Queremos seguir creciendo de forma sólida, generando confianza y oportunidades para nuestros inversores y las comunidades donde operamos. En el ámbito social, me gustaría organizar un concierto benéfico contra el hambre y contar con la cantante Aitana. Representa más a los jóvenes que muchos políticos.

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