José de la Uz no es un alcalde cualquiera. Su filosofía de entender un municipio como una empresa y traducir su posición a un CEO que busca cifras y resultados a sus cuentas ha llevado a convertir a Las Rozas a un auténtico hub a nivel europeo. Y las cifras así lo avalan. Con el impulso de Las Rozas Innova, la ciudad se ha posicionado a la vanguardia de los avances tecnológicos, presidiendo la Red Española de Ciudades Inteligentes y logrando que las compañías pongan en este lugar en su punto de mira. El propio jefe del consistorio lo explica en Forbes.
Tras una década al frente de Las Rozas, ¿cuáles han sido los mayores desafíos a la hora de transformar el municipio de ciudad residencial a un lugar de innovación y talento, y cómo consiguió que vecinos y oposición se sumaran a esa visión?
El mayor reto fue cambiar el marco mental: salir a competir para atraer talento, empresas e innovación para que la ciudad no se quedara atrás. Ese cambio no se podía imponer, solo era posible a partir de la escucha. Al llegar a la alcaldía en 2015 nos reunimos con empresarios, centros educativos, asociaciones, ciudadanos y los grupos políticos. De ahí salió una visión compartida de lo que debía ser Las Rozas para mantener su calidad de vida, algo que requería adaptarse a la nueva realidad impuesta por los cambios tecnológicos. Fuimos trabajando en esa línea, y en 2020 la idea se plasmó en la creación de la empresa pública Las Rozas Innova, el vehículo para la gobernanza de esa transformación. Lo hicimos en lo más duro de la pandemia, con mucho sacrificio, no podíamos esperar a que la situación se normalizara.
El otro gran desafío fue modernizar una Administración que hace diez años apenas ofrecía a los vecinos trámites digitales. Hoy les ofrecemos casi 500, y el 83 % de sus gestiones con nosotros son electrónicas. Es un salto enorme. La clave para sumar voluntades ha sido escuchar y ofrecer resultados: somos la segunda ciudad de España con menos paro, y el empleo tecnológico en el municipio ha crecido más de un 94% en la última década, según la Fundación Cotec para la Innovación, más que en ningún otro del país.
La atracción y motivación del talento es clave para cualquier ecosistema innovador. ¿Qué ha funcionado mejor en Las Rozas para motivar a su equipo y atraer profesionales y emprendedores externos?
Lo más importante es tener un propósito claro y saber transmitirlo. Lograr que los equipos interioricen que su trabajo impacta en la vida de 100.000 personas, que lo que hacen responde a un plan para construir una ciudad más próspera y sostenible. Por supuesto, luego hay que poner las condiciones para que los empleados públicos trabajen alineados con el proyecto: formación continua, flexibilidad, una estructura más ágil… Y estabilidad: tenemos una tasa de temporalidad estructural de un 7,6%, por debajo del 8% establecido por ley para la temporalidad en el empleo público, y veníamos de un 64% En una organización con más de 700 personas, todas estas cosas marcan la diferencia.
El empleo tecnológico en Las Rozas ha crecido más de un 94% en la última década
Con Las Rozas Innova estamos creando el ecosistema de startups más potente de la región tras el de Madrid. Las ayudamos a crecer, conectarse y buscar financiación, y les ofrecemos la ciudad para que prueben sus soluciones en un entorno controlado. Las Rozas tiene mucho que brindar a los profesionales más cualificados y a quienes quieran formar una familia: naturaleza, un gran ecosistema educativo y una oferta deportiva muy potente.
Se suele pensar que la Administración pública es lenta y burocrática. ¿Cómo ha conseguido que en Las Rozas sea un motor real de innovación tecnológica?
Viendo el Ayuntamiento como una gran empresa de servicios y el primer emprendedor del municipio. Impulsamos una transformación radical en nuestra organización, pasando de una forma de trabajar basada en el documento a otra basada en el dato. No hemos querido que este proceso “baje” sin más desde la dirección, sino que sea un movimiento compartido en el que las personas crean en esa innovación, la inspiren y la lideren. Por eso nació nuestro Comité de Transformación Digital, donde los responsables de las distintas áreas piensan juntos cómo construir una Administración más sencilla y útil.
También es clave la colaboración público-privada. Apostamos por la Compra Pública de Innovación, que nos ha permitido desarrollar una Plataforma de Ciudad inteligente con 50 capas de información, lo que se plasma por ejemplo en un Gemelo Digital de la ciudad desde donde podemos controlar la movilidad y las emisiones del municipio. Desde Las Rozas Innova lanzamos retos a las startups para que aporten soluciones a los problemas de la ciudad y nos ayuden con la transformación de la Administración. Además, hemos creado una ordenanza que ha simplificado los trámites y ha convertido Las Rozas en un “sandbox” nuevas tecnologías para la ciudad, en un entorno controlado de pruebas para proyectos innovadores. La clave es el papel conector de la Administración: hemos desarrollado un ecosistema, no nos limitamos a los proyectos sueltos.
Las Rozas Innova funciona como una empresa pública con un consejo independiente y un código de buen gobierno. ¿Qué diferencia marca esta profesionalización en la capacidad de la ciudad para generar empleo tecnológico y atraer inversión?
Nos aporta velocidad, especialización y credibilidad. El consejo independiente y el código de buen gobierno que rige al Consejo de Administración de Las Rozas Innova generan confianza en el sector privado y en los inversores. Les demuestran que funcionamos con estándares empresariales.
Las Rozas Innova ha colocado al municipio en el mapa europeo de la innovación
Gracias a esa profesionalización, Las Rozas Innova está dando resultados: ha captado 24,3 millones de euros de los fondos europeos para proyectos que mejoran la ciudad, ha colocado a Las Rozas en el mapa europeo de la innovación colaborando con más de 90 ciudades en 15 proyectos internacionales de I+D +i, impulsado decenas de startups, ha atraído inversiones y ha convertido nuestras calles en un entorno real de pruebas de tecnologías como el Internet de las Cosas o la IA.
Las Rozas Innova es el puente que une el talento público y el privado. Nos
ha permitido incorporar personal cualificado: Ana Herrera, la directora de Desarrollo Empresarial y Emprendimiento, acaba de ganar el Women Startup Award en la categoría de Innovación Abierta por impulsar un ecosistema tecnológico y emprendedor desde la colaboración público-privada.
Los resultados de Las Rozas son muy llamativos: top 10 en empresas tecnológicas de España, segunda ciudad con menos paro, segunda en startups de la región… ¿Dónde cree que reside el mérito, en la iniciativa pública o en el impulso de las empresas?
¿Quién crea riqueza y empleo? Las empresas. Nuestro papel como Administración es no poner obstáculos a la iniciativa privada, generar un ecosistema favorable a su desarrollo y a la innovación. Y eso se plasma en hechos: mantenemos los impuestos de nuestra competencia en sus mínimos legales, somos la cuarta ciudad de España con mayor competitividad fiscal. Estamos digitalizando la Administración: todas nuestras tasas e impuestos pueden pagarse por Bizum, ofrecemos cada vez más trámites digitales, eliminamos burocracia… Nosotros facilitamos las cosas, pero el mérito es de unas empresas, emprendedores y autónomos que empujan.
La planificación a largo plazo es rara en política. ¿Qué le ha permitido mantener una estrategia sostenida durante diez años y cómo se asegura de que la ciudad siga avanzando más allá de los ciclos electorales?
Nuestra estrategia de ciudad inteligente se planteó con una visión consensuada a largo plazo, con 2030 en el horizonte, y se revisa periódicamente. Creamos Las Rozas Innova para gestionar el proceso y darle continuidad, aunque cambien los gobernantes. El proyecto seguirá cuando dejemos la alcaldía.
Y hay otro punto clave, una gestión profesional, con objetivos medibles. Igual que un CEO reporta a su consejo, yo rindo cuentas con datos. Nuestros indicadores económicos son espectaculares: segunda ciudad con menos paro de España, décima del país con más empresas tecnológicas, tercera de la Comunidad de Madrid con más empresas, y segunda de la región con más startups. En los últimos años Las Rozas y su Ayuntamiento han recibido más de 50 premios nacionales e internacionales, no es casual.
Las Rozas participa en múltiples proyectos europeos y mantiene vínculos con ciudades de LATAM y Asia. ¿Qué aprendizajes trae esa proyección internacional y cómo impactan en los vecinos y empresas locales?
Participamos junto con 90 ciudades en 14 proyectos de Horizon Europe, el programa marco de investigación e innovación de la Unión Europea. Hemos viajado a numerosos países de Hispanoamérica y Europa, a China, Taiwán, Arabia Saudí… En diciembre estaremos en Vietnam, como la única ciudad europea seleccionada para competir por ser declarada ‘Comunidad más inteligente de 2025’ por el Intelligent Community Forum, una red global de más de 200 ciudades y regiones. Y recibimos a delegaciones extranjeras continuamente.
Igual que un CEO reporta a su consejo, yo rindo cuentas con datos
Esta internacionalización nos aporta ideas, aprendemos de modelos que funcionan en otros países. También nos lleva a conocer socios estratégicos para proyectos que una ciudad sola no podría abordar, a lograr fondos europeos y a encontrar oportunidades para nuestras empresas.
Con la experiencia de Las Rozas, ¿cuáles cree que son los principales retos que tendrán las ciudades españolas en los próximos años en digitalización, innovación y emprendimiento?
Me parece esencial la gobernanza del dato. Las Administraciones Públicas recopilamos cantidades masivas de datos muy útiles si sabemos analizarlos y usarlos, siempre con ciberseguridad y ética, porque los ciudadanos nos confían información personal y tenemos que proteger nuestros sistemas. Competiremos por atraer y retener talento, como las empresas. La digitalización administrativa se profundizará, porque la ciudadanía exige servicios públicos ágiles. Y el desarrollo sostenible será obligatorio. Por suerte, el Internet de las Cosas, la IA, los gemelos digitales y otras tecnologías nos ayudan a gestionar la energía, el agua, la movilidad o los residuos. Será importante seguir cerrando la brecha digital, porque nada de esto tiene sentido sin poner a las personas en el centro.
También tendrán peso las alianzas como la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), que preside Las Rozas, y que reúne a 164 municipios que suman 27 millones de habitantes. En ella trabajamos juntos para la transformación digital y sostenible de nuestros territorios, cada uno desde su situación y necesidades particulares.
