La noche del lunes Milán contuvo la respiración. El último desfile de Giorgio Armani dirigido por Giorgio Armani.
Casi un mes después de su muerte, su casa presentó, en el corazón de su otra casa, el Palacio de Brera, la última colección del diseñador italiano para su marca de nombre homónimo.
La palabra emotivo se queda corta para el encuentro, y es que no fue simplemente un desfile: fue un homenaje al hombre que revolucionó la moda. El último desfile que llevó su sello persona. Y fue perfecto.
La música en vivo de Ludovico Einaudi al piano, las luces del Palacio y los modelos, fieles a su diseñador, transformaron el espacio en un escenario íntimo. Invitados como Cate Blanchett, Glenn Close, Richard Gere, Naomi Campbell, Marco Bellocchio o Rosalía fueron testigos de un espectáculo que quedó grabado para siempre en la historia de la moda.
Aunque Armani diseñó la colección Primavera/Verano 2026, no pudo formar parte del desfile, ni posar con todos sus modelos reunidos en la escalinata, como llevaba haciendo durante 50 años. Pero se respiraba Armani en cada esquina del Palacio.
Él estaba ahí, entre todos. Y en la réplica de la fotografía histórica, había un hueco delante de la escalinata con el nombre de Giorgio Armani. Sus modelos, además de homenajearlo, dejaron claro que la visión del diseñador permanecerá intacta para siempre. La foto representa lo que es la Maison más allá de la moda: una familia.
La colección, inspirada en Pantelleria, Italia —su isla refugio—, no defraudó. Parecía una teletransportación a una noche de luna llena frente al mar mediterráneo. Telas que fluían como el viento de la isla, tonos neutros que se mezclaban con azules color mar y tierra volcánica de la región. Cada look confirmó lo que siempre fue la esencia Armani: la elegancia que no necesita ruido.
Desfile Giorgio Armani colección Primavera/Verano 2026.
Fue parte de las celebraciones del 50º aniversario de la firma, iniciadas con Armani/Archivio y la exposición en la Pinacoteca de Brera, donde más de 130 piezas históricas fueron expuestas. Y aunque la noche cerró una de las semanas más importantes del año, abrió un capítulo nuevo en la historia de la marca.
Giorgio Armani ya no está entre nosotros, pero su legado sigue liderando el ritmo de la moda y de la cultura. Y lo seguirá haciendo.
