El curso turístico más exitoso de la historia de España enfila el final de la temporada entre contrastes. Así, el país se prepara para cerrar 2025 con cifras históricas de número de visitantes y, tras un «buen» último trimestre, Barceló Hotel & Resorts espera firmar otro “año récord” en ingresos, aunque el crecimiento será más moderado que el de los últimos ejercicios, cuando la bonanza post-pandemia permitió crecimientos de dos dígitos. Raúl González, CEO EMEA de Barceló Hotels, comparte su percepción de que comienzan a percibirse síntomas de agotamiento en el ciclo de crecimiento. “El ciclo empieza a declinar, pero no veo una crisis enorme; lo que vivimos es una desaceleración”, ha anotado González en un encuentro con los medios de comunicación celebrado el martes 22 de septiembre.
Cambio de ciclo
Así, González ha destacado que la ocupación en determinados destinos nacionales -como Andalucía o Baleares- ha sido más débil que en 2019 e, incluso, que en la temporada de 2024. “En los picos del verano apenas hay margen de crecimiento, porque ya operamos en niveles de ocupación del 90 %. Los ajustes se notan más en los valles, como finales de temporada”, explica González.
Además, González señaló que “la debilidad está en las reservas de última hora, que no funcionan como antes. Hemos generado una cultura equivocada: el cliente cree que una reserva es solo una opción de compra gratuita, y eso nos complica la gestión. Los precios, en cambio, tienden a subir según se acerca la fecha de check-in.”
Por ello, la clave está en los precios. La tarifa media sigue subiendo, aunque a ritmos más moderados. El RevPar (ingreso por habitación disponible) crece entre un 6 % y un 7 %, impulsado más por el precio que por la ocupación. Según González, el segmento premium y de lujo resiste mejor la ralentización: “La parte alta del mercado sigue aguantando muy bien. Es donde más potencial vemos”, afirma el directivo, que destacó la apuesta por la marca Royal Hideaway dentro del portfolio del grupo.
500 millones de euros para inversiones
Barceló mantiene su plan inversor de “500 millones de euros», destinado a la compra de activos y a la reforma de hoteles. “No tenemos intención de vender ladrillo. Para una empresa familiar como la nuestra, tener activos en propiedad da solidez financiera”, confirmó González. En los próximos meses, se anunciará la adquisición de un nuevo hotel —pendiente del visto bueno de Competencia— en un destino donde ya operan. Además, el grupo avanza en la renovación de su cartera con aperturas en París, Roma -donde Barceló quiere tener «el hotel referente en MICE en Roma»-, Dubái, Casablanca, Maldivas, El Cairo, Valladolid y Murcia, entre otros. González manifestó su deseo de poder crecer en Portugal e Italia, países donde, señala, los precios de los activos siguen siendo «muy elevados», lo que hará que las operaciones se cierren activo a activo y hace difícil las grandes operaciones corporativas
El directivo espera que el «cambio de ciclo» que se avecina pueda provocar una «cierta moderación» en el mercado de inversión, llevando a precios más «racionales y menos emocionales», aunque no visualiza una bajada en los precios hoteleros. «El año que viene seguirán subiendo los precios, en España no preveo para el año que viene una caída significativa», afirmó.
González destacó la recepción que, dentro de la industria, ha tenido la reciente adquisicion de Rusticae, la red de alojamientos con encanto. “Queremos competir en el turismo de interior, un segmento en crecimiento, con una marca muy reconocida entre los mayores de 40 años y un público fiel”, detalló, además de manifestar que no prevén la adquisición de establecimientos para incrementar la marca. «Al contrario, sí podemos ayudar al propietario que desee vender a encontrar un comprador».
Comportamiento de los mercados
Reino Unido y Alemania siguen siendo los principales emisores para Barceló, incluso en un contexto de incertidumbre económica. Más preocupante es el mercado estadounidense, frenado por la fortaleza del dólar, especialmente contra el peso mexicano, destino estrella de la cadena para el cliente estadounidense. «En Estados Unidos notamos una cierta moderación. Sigue creciendo el RevPar pero lo hace en modo vegetativo, al 2-3%», a ritmo menor». En cuanto a Asia, González ha destacado la apuesta de la cadena por el sudeste asiático, aunque ha cesado su interés por China y, en cambio, apunta a India como uno de los posibles grandes mercados emisores en el medio plazo.
IA y sostenibilidad
La cadena también refuerza su apuesta por la sostenibilidad y la inteligencia artificial. Solo en 2024 destinó once millones de euros a proyectos de eficiencia y regeneración bajo la iniciativa Barceló ReGenere, certificada por Global Sustainable Tourism Council (GSTC) , y trabaja en 32 proyectos de IA aplicada , desde revenue management —optimización de precios y upgrades— hasta automatización de tareas repetitivas y mejoras en la experiencia del cliente y del empleado. “Estamos en una fase donde la tecnología marcará la diferencia. La IA nos ayuda tanto en los procesos internos como en la relación con el huésped”, asegura González.
