En segundo lugar, la capacidad de compra con el propio salario aumenta casi dos puntos en comparación con la edición anterior y preocupa especialmente a las mujeres, con un 54%.
La estabilidad laboral cobra mayor peso respecto a 2024, situándose en el 39%, una preocupación que es más notable entre menores de 54 años (42%), quienes tienen ingresos brutos anuales inferiores a 21.000 euros (48%) y los residentes en Andalucía (51%).
La bajada progresiva de los tipos de interés sitúa este aspecto en el quinto lugar de importancia (38%), seguido de la posibilidad de acceder a financiación hipotecaria, que alcanza el 33%.
Entre las principales medidas propuestas por los compradores para mejorar el acceso a la vivienda figuran la reducción de los gastos asociados a la adquisición (56%), el incremento salarial (55%) y la rebaja de los tipos de interés, que pese a situarse en el 51% pierde seis puntos porcentuales respecto al año anterior.
A estas propuestas se suma la recuperación de incentivos fiscales para la compra de vivienda habitual, señalada por el 44% de los encuestados, la concesión de hipotecas al 100% (43%), así como, en menor medida, el fomento del alquiler con opción a compra (33%) y el aumento del parque de vivienda protegida (31%), mientras que solo un 15% considera eficaz la línea de avales ICO dirigida a jóvenes o familias con hijos a cargo.
