Una buena propuesta
Como hemos dicho al principio de este artículo: no basta con una buena idea. Si quieres triunfar, además debes saber vender esa idea. Elaborar una propuesta atractiva, que sepa enganchar tanto a empleados, como a socios, inversores, clientes, colaboradores y cualquiera que sea susceptible de ser stakeholder de tu negocio.
Un planning ajustado
Hay que ser realista tanto a la hora de establecer objetivos como a la de poner los plazos para cumplirlos. Como diría el Cholo Simeone: partido a partido. La mayor parte de los pasos a seguir para alcanzar el éxito conllevan su tiempo. Elabora una planificación ajustada a tus posibilidades y no te olvides de las posibles trabas.
Buenos contactos
Como en todas las profesiones, un buen contacto a tiempo puede ser de gran ayuda. No te olvides del networking, precisamente ahora que tu negocio está echando a andar, tienes que rodearte lo mejor posible y hacer que te conozcan, que se fijen en ti y en tu negocio.
Consejos útiles
Por mucha experiencia que puedas tener en el sector, empezar una empresa desde cero nunca es sencillo. Acércate a aquellos que lo hicieron antes que tú, escucha sus consejos, pídeselos si hace falta y no te olvides de las cuestiones legales y administrativas: mejor que se encargue alguien cualificado, ya aprenderás.
El equipo adecuado
Y bien pagado. Si quieres buenos profesionales, no puedes pretender tenerlos gratis. Por mucho que alguien quiera implicarse en el proyecto, al fin y al cabo es tuyo, no suyo, no pretendas que los demás hagan las cosas gratis. La generosidad tiene sus límites. Busca grandes profesionales y págales como merecen, es decir, bien.