Los aviones espaciales, que parecían cosa del pasado, están de vuelta y más avanzados que nunca. La Agencia Espacial Europea (ESA) ha anunciado un nuevo proyecto ambicioso llamado Invictus, con el que busca desarrollar un avión capaz de volar a una velocidad increíble: cinco veces la velocidad del sonido, o Mach 5. Esto significa que podría hacer un viaje de Londres a Nueva York en solo una hora. Si todo sale según lo planeado, este avión podría estar funcionando para el año 2031.
Tecnología del futuro para un viaje ultrarrápido
El proyecto Invictus estará liderado por la consultora británica Frazer-Nash y utilizará una tecnología innovadora. Su motor, conocido como SABRE, tiene un sistema de «preenfriado» que resuelve un problema clave de los vuelos a alta velocidad. Los aviones hipersónicos se calientan mucho debido a la fricción del aire, y los motores normales no pueden soportar esas altas temperaturas. La tecnología de Invictus enfría el aire en una fracción de segundo, permitiendo que el motor funcione sin problemas a velocidades extremas.
Este motor también es especial porque usa oxígeno del aire para funcionar, lo que reduce la cantidad de combustible que necesita llevar el avión, haciéndolo mucho más ligero y eficiente. En el espacio, usará hidrógeno líquido.
Un cambio de juego para los viajes y el espacio
El equipo de Invictus tiene el reto de tener un concepto listo en tan solo un año y un avión en funcionamiento para 2031. El jefe del departamento mecánico de la ESA, Tomasso Ghidini, asegura que esto sentará las bases para una nueva era de los viajes. El objetivo es crear aviones que despeguen como una aeronave convencional pero que puedan llegar al espacio como un cohete, lo que podría revolucionar tanto el transporte en la Tierra como la forma en que viajamos más allá.
