Actualidad

La cumbre de la Casa Blanca: el plan de Trump para Ucrania choca con la postura de Zelenski

Esta propuesta llega antes de una importante reunión en la Casa Blanca donde Zelenski se encontrará con líderes de Europa, incluyendo a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y a los jefes de gobierno de países como Alemania, Reino Unido e Italia.

El encuentro entre Trump y Putin en Alaska, además de haber sido calificado como un evento único y «especial», ha dividido a la prensa; algunos lo han definido como un primer paso hacia la paz, otros lo han calificado como una oportunidad perdida para llevar precisamente la paz a Ucrania. El hecho es que Putin no parecía en absoluto ese líder en dificultades que muchos describían, sino todo lo contrario: los aplausos de Trump a su llegada a la alfombra roja, los apretones de manos, las sonrisas; momentos que desde la Casa Blanca algunos han calificado de «vergonzosos». Putin ha dejado clara su negativa a tener armas de la OTAN a pocos kilómetros de «su casa». El hecho es que no se ha alcanzado la paz en Ucrania, pero al menos se ha abierto un debate que podrá continuar.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha propuesto un camino para que el conflicto en Ucrania llegue a su fin de manera casi inmediata. Su idea se centra en que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, haga dos concesiones clave a Rusia. La primera es renunciar a la posibilidad de recuperar Crimea, la segunda es desistir de la aspiración de Ucrania de unirse a la OTAN. La propuesta de Trump, al alinearse con los puntos clave del Kremlin, genera un debate sobre si este camino puede realmente llevar a una paz duradera o si, por el contrario, podría sentar un precedente peligroso para la seguridad y soberanía de otros países.

Esta propuesta llega antes de una importante reunión en la Casa Blanca donde Zelenski se encontrará con líderes de Europa, incluyendo a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y a los jefes de gobierno de países como Alemania, Reino Unido e Italia. La lista de asistentes también incluye al secretario general de la OTAN y a los presidentes de Francia y Finlandia. Este encuentro subraya la relevancia de la situación en Ucrania para la comunidad internacional.

Según Trump, las raíces de la guerra se encuentran en la anexión de Crimea y en el deseo de Ucrania de unirse a la OTAN. Él argumenta que si Ucrania renuncia a esos dos puntos, el conflicto podría terminar rápidamente. Sin embargo, esta postura contrasta con la de Zelenski, quien ha insistido en que Rusia debe cesar el fuego de inmediato.

El presidente ucraniano ha sido firme en su postura de que la soberanía de Ucrania no es negociable. Él ha declarado que la constitución del país prohíbe ceder territorio y ha advertido que cualquier renuncia a la tierra controlada por Ucrania serviría como una base para futuras agresiones rusas. Zelenski ha insistido en que el primer paso para cualquier acuerdo de paz debe ser un alto al fuego por parte de Rusia. No se puede negociar con un arma apuntando a la cabeza, ha dicho en esencia.

Zelenski también ha subrayado la necesidad de que cualquier acuerdo de paz incluya garantías de seguridad sólidas para Ucrania, con la participación de Estados Unidos y Europa. Él ha expresado su deseo de una reunión tripartita que incluya a Ucrania, Estados Unidos y Rusia para discutir los términos de un acuerdo. Esta postura contrasta con la visión de Trump, que parece estar más alineada con las demandas de Putin, ya que ha abogado por un acuerdo directo sin un cese del fuego previo.

Artículos relacionados